Los hermanos Fernando y Gonzalo Benítez, además de su madre Nélida Llanos, se negaron a declarar este mediodía ante el fiscal Romero Jardín, en la causa que los tiene como acusados de haber mantenido encerradas a dos chicas durante un tiempo prolongado, período en el que las sometieron a todo tipo de agresiones y vejaciones.
Los imputados habían llegado esta mañana a Bahía, procedentes de la comisaría de Carmen de Patagones, donde estaban detenidos desde el pasado lunes a la noche, cuando se conoció la noticia que conmueve al país. Al bajar del móvil policial que los trajo, uno de ellos alcanzó a decir que era inocente y que no había violado a nadie.
Cabe recordar que la familia que hoy se conoce como “Clan Benítez”, habitaba una casa de Güemes al 3.700, del barrio Latino, lugar donde tenían secuestradas a dos jóvenes que todavía están internadas en los hospitales públicos bahienses.
A una de ellas, que pudo escapar después de meses de cautiverio, la encontró un familiar casi desvanecida y fue su madre la que pudo hacer la denuncia. La otra, en tanto, fue hallada horas más tarde por la policía, desmayada en el patio del inmueble.