De acuerdo a un informe de la Confederación de la Mediana Empresa (CAME), en el último mes las Pymes registraron una caída del 2 por ciento frente a igual mes del año pasado, y en apenas tres meses acumularon una baja anual de 1,3 por ciento.
“A pesar que se sintió más presencia de consumidores en la calle que en febrero, el despacho fue insuficiente por la falta de efectivo y el mayor cuidado del ingreso en la economía familiar. Los movimientos constantes en el tipo de cambio tampoco ayudaron”, precisó la entidad en un comunicado.
El informe también alertó sobre la performance de los comercios teniendo en cuenta que se está comparando contra el mismo mes de 2017, cuando las operaciones tuvieron un desplome del 4,4 por ciento. 18 de los 19 rubros relevados descendieron en la comparación anual y sólo uno se mantuvo sin cambios (Alimentos y bebidas).
En tanto, el sector textil, joyerías y relojerías registraron la retracción de ventas más significativa (4,4 por ciento), le siguieron marroquinerías (3,8 por ciento), electrodomésticos y electrónicos (3 por ciento).
El descenso, que se replica desde 2016, estuvo determinado por el direccionamiento de consumo a los insumos básicos y por la incertidumbre sobre el rumbo económico. “Se movieron mejor las operaciones con financiamiento, pero muchos consumidores se encontraron con sus tarjetas cargadas, y debieron postergar la compra por el rechazo a la hora de pagar. El Ahora 12, Ahora 6 y Ahora 3 siguieron siendo una alternativa usada al momento de decidir la transacción”, detallaron.
El año pasado, el consumo no pudo recuperar el desplome del 7 por ciento de diciembre de 2016 y volvió a cerrar en rojo, con una caída del 1,1 por ciento.
