Un día como hoy pero en 1887, la imagen original de la Virgen de Luján fue coronada por el Papa León XIII. Desde entonces la santa patrona de Argentina recibe homenajes en diversas iglesias y parroquias de todo el país.
La imagen, de 38 centímetros en arcilla cocida, llegó al país en el año 1630 de la mano de un portugués que vivía en Santiago del Estero. Cuando llegó a tierras argentinas y eran trasladadas a su lugar de destino, la carreta se detuvo en Zelaya, partido de Pilar, provincia de Buenos Aires.
Al bajar uno de los cajones los bueyes lograron mover el vehículo. Los curiosos lugareños abrieron el cajón y se encontraron la imagen de la Virgen que quedó depositada desde ese momento a orillas del río Luján.
Esta celebración que se extenderá durante todo mayo tiene como peculiaridad el pedido de canonización del “Negro Manuel” y del padre Jorge Salvaire, apóstoles de la Virgen.
El «Negro Manuel fue testigo ocular del milagro y primer custodio de la sagrada imagen de Nuestra Señora, y el padre Salvaire es reconocido como difusor de su culto y constructor de la basílica.
