A las 9.51 de la mañana de este jueves, tras casi 23 horas de debate, la Cámara de Diputados de la Nación dio media sanción a la interrupción voluntaria del embarazo por 129 votos a favor, 125 en contra y 1 abstención.
La aprobación del aborto legal despertó el festejo en recinto y en las calles, donde cientos de mujeres celebraron el histórico avance en los derechos de las mujeres. Durante la maratónica sesión hablaron más de 200 legisladores que respaldaron y rechazaron la iniciativa.
En un dramático final, fue un diputado de La Pampa quien inclinó la balanza a última hora, al confirmar el apoyo de los otros dos legisladores de esa provincia. A ellos se sumaron, también este día, los macristas Gastón Roma y Héctor Stefani.
“Este es el siglo de los derecho de las mujeres, más tarde o más temprano las jóvenes que portan los pañuelos verdes van a conquistar lo que reclaman. Saquemos de la clandestinidad al aborto”, pidió al borde de las lágrimas la oficialista Silvia Lospennato, la última oradora a favor antes de la votación.
El cierre de la votación fue desordenado. El tablero inicialmente marcó 131 a favor, 123 en contra y 1 abstención pero un grupo de diputados empezó a reclamar que estaba mal marcado. Finalmente la diferencia se achicó pero igual el proyecto el visto bueno y ahora tendrá que definir el Senado.
Pero no terminó ahí. Luego de su votación Elisa Carrió pidió la palabra, lo que fue rechazado por la oposición, que le reclamaba no haber asistido a todo el debate. “Hace veinte horas que estamos acá”, la increpaban. La diputada tuvo una muy breve intervención en la que lanzó una advertencia al oficialismo: “He estudiado este tema durante 40 años y no he hablado para preservar la unidad de Cambiemos”.
Uno de los discursos más encendidos de las 23 horas de debate fue protagonizado por la kirchnerista Gabriela Cerruti. “Se habla de libertad de conciencia, yo no tengo libertad de conciencia cuando estoy acá adentro legislando y votando, porque a mí no me votaron por mis convicciones personales, por mi religión, por la literatura que leo”, aseguró la diputada.
Seguidamente, apuntando a los indecisos agregó: “Como legisladores la única obligación que tenemos es ser capaces de representar el sujeto que mejor exprese el mayor punto de conciencia colectiva de la comunidad en un momento, y ese mayor punto de conciencia de la comunidad argentina, ese sujeto, está en la calle, tiene un pañuelo verde, es feminista y es joven”.
Uno de los oficialistas que se apuso a la media sanción fue el diputado Guillermo Montenegro. “No voy a acompañar. Si tanto hemos tenido que discutir quiere decir que nosotros no estamos convencidos. Se están atacando otras normas jurídicas que en principio tienen mayor validez, o tienen un rasgo constitucional superior”, detalló.
El clima en el recinto mantuvo la tensión durante toda la jornada. “Quienes voten en contra de esta ley votan porque quede en pie el aborto clandestino, la muerte de mujeres, las miles de mutilaciones, el negocio de las clínicas privadas y toda esta orientación de tutelaje del Estado de la Iglesia”, fustigó la diputada del FIT, Romina del Pla.
