Después de un largo trayecto, este lunes se leerá el veredicto del juicio por el asesinato de Diana Sacayán (40), una reconocida referente del colectivo travesti e impulsora de la ley de cupo laboral trans que se sancionó en la Provincia en 2015 pero que todavía sigue sin implementarse.
Gabriel David Marino (25), acusado de haberla asesinado de 13 puñaladas en 2015, podría recibir prisión perpetua. Esa es la pena que solicitaron tanto la fiscalía como las dos querellas, integradas por representantes de la familia de la víctima y del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (INADI).
“Desde las querellas, la familia y los amigos y compañeros de Diana, se espera una sentencia histórica. Queremos que el Poder Judicial se exprese por primera vez en la historia sobre la muerte de las travestis y reconozca que esto fue un travesticidio”, afirmaron en un comunicado.
La última audiencia, está prevista para las 9.30 en Talcahuano al 550. Durante el juicio el fiscal Ariel Yapur consideró a Marino responsable de “homicidio triplemente agravado por odio de género, por violencia de género y por el vínculo”. A su vez, afirmó que “el caso de Diana es un caso testigo de las violencias contra las mujeres trans”.
Por último, el fiscal aseguró que “la virulencia del ataque encuentra explicación en el odio a la identidad de género de Diana y en su expresión”, teniendo en cuenta que la víctima presentaba lesiones en “las zonas que hacen a su identidad como mujer travesti”.
Dos cámaras de seguridad cercanas al domicilio de la víctima ubican al imputado en el lugar del crimen. La abogada de la familia de Diana, Luciana Sánchez, solicitó a los jueces “medidas de reparación y no repetición” entre las que se destacan la creación de más fiscalías especializadas, la ampliación de la actual Unidad Fiscal Especializada de Violencia contra las Mujeres (UFEM) y la aplicación de protocolos específicos para estos casos.
