Hoy se conocieron las primeras consecuencias del pase a secretaria del ex ministerio de Cultura de la Nación. Según una resolución publicada en el Boletín Oficial, se autoriza “la implantación de un régimen de tarifas y aranceles para los museos nacionales, destinado a contribuir a la adquisición y conservación de obras artísticas, históricas o científicas”.
Así, los establecimientos quedan autorizados a cobrar entradas por primera vez en más de veinte años. Además, se establece el inicio de la modalidad en el Museo Nacional de Bellas Artes (MNBA), que del 25 de septiembre hasta el 17 de febrero de 2019 realizará una muestra por un valor de 100 pesos por persona, según el texto.
Según la resolución, número 1082/2018, “el régimen de tarifas y aranceles consistirá en la fijación de derechos que serán abonados, en concepto de ingreso a esos establecimientos”.
De todos modos, según aclara la norma, “la entrada será gratuita para los alumnos y docentes de los establecimientos educativos; siendo también del mismo modo, para el público en general, por lo menos un día por semana”.
La novedad ya generó el rechazo de los trabajadores, que se manifestaron en una asamblea en las escalinatas del edificio de Avenida del Libertador 1473 y disfrazaron de luto las columnas para gritar que “la cultura no se achica”.
“Con esta medida están poniéndole una clara barrera al conjunto del pueblo para su acceso a la cultura y los bienes culturales. La situación es muy grave, no la podemos dejar pasar”, dijo a Nicolás Rodríguez Saa, delegado de la Junta Interna de ATE del ahora ex ministerio.
