A principio de agosto la fábrica de motos Zanella presentó un plan de trabajo que incluye la reducción a dos días por semana del trabajo de su planta de Mar del Plata. La medida que fue tomada hace dos meses fue para “salvaguardar” los puestos de trabajo.
Sin embargo, a días de cumplirse el plazo dentro del cual los directivos de la empresa esperaban que “la situación se revierta” el panorama es incierto. “La idea era salvaguardar al personal”, explicó el titular de la UOM de esa localidad, José Luis Rocha.
“Las empresas hacen estas cosas porque son positivos, pero yo soy realista y no vemos que esto mejore“, agregó Rocha. Por el momento los 65 trabajadores que forman parte de la planta cobran un 63,5% del sueldo en bruto.
En este sentido, desde el gremio evalúan que se trata de una situación generalizada. “Son muy pocas las empresas que están trabajando porque los materiales están todos en precio dólar y se está haciendo difícil”, sostuvo Rocha.
Al mismo tiempo, Zanella comunicó a principios de septiembre la cancelación de la fabricación de vehículos utilitarios que tenía previsto realizar en la localidad balnearia. La idea era producir 1.200 unidades por año y sumar cerca de 80 empleados.
Eso tampoco sucedió. “El cambio en el contexto económico, el surgimiento de nuevos competidores que importan el producto terminado y las condiciones arancelarias nos han movido a modificar los planes previstos”, detallaron desde las oficinas de la marca.
