Mientras crece el descontento por la batería de aumentos dispuestos por el Gobierno Nacional, se multiplican los pedidos para declarar la emergencia tarifaria en la provincia. Según reconstruyó Diputados Bonaerenses, ya son más de diez las comunas que reclaman a sus intendentes frenar los tarifazos.
En las últimas horas, en Junín concejales le pidieron al jefe comunal, Pablo Petrecca, que “utilice todos los mecanismos legales a su alcance para asegurar el acceso a los servicios públicos esenciales de todos los habitantes del distrito”.
Según detallan en el proyecto presentado en el Concejo Deliberante, la “imposibilidad de pagar estas tarifas se da por parte de un número cada vez mayor de familias, lo que se agrava con la mayor dificultad para acceder a la tarifa social”.
Iniciativas similares ya fueron presentadas en 9 de Julio, Baradero, San Nicolás y Chivilcoy. Mientras tanto en Saladillo, Olavarría, Tapalqué, 25 de Mayo, Bolívar, Roque Pérez y Azul avanzan en la confección del pedido.
Una de las localidades más movilizadas es Saladillo, donde un grupo de autoconvocados juntó más de 1.000 firmas y logró que el Concejo Deliberante se reuniera en una sesión extraordinaria para tratar la problemática.
“No puede ser que se lleve la mitad de nuestros sueldos las facturas de luz y de gas”, dijo Victoria Di Benedetto, una de las vecinas y añadió: “A un comerciante le dijeron que no prenda todas las heladeras para vender la bebida fría. Parece que ahora la culpa la tiene la gente”.
Otra ciudad convulsionada es Bolívar, donde los vecinos protestaron días atrás en las puertas de la cooperativa local. En esa oportunidad, los concejales pidieron frenar los aumentos de luz y gas para que la solución no sea sólo “extender las facilidades de pago”.
A nivel provincial, el diputado por la séptima sección electoral, César Valicenti presentó un proyecto a fines de marzo en la Legislatura bonaerense para que las tarifas se retrotraigan a diciembre 2017 y no haya aumentos por todo este 2018.
