El resultado del pormenorizado trabajo que realizó esta tarde la Comisión de Salud Pública de Diputados dejó una sensación de satisfacción en la nutrida delegación de acompañantes terapéuticos que llegaron hasta el Anexo de la Cámara baja.
Sucede que, tras el compromiso asumido la semana pasada por la presidenta del cuerpo especializado, la diputada Alejandra Lordén, el debate tomó un impulso que parece ser irreversible.
Ahora, más que nunca, los acompañantes terapéuticos de la provincia ven como una certeza la posibilidad de que sancione la norma que regula el ejercicio de su profesión y por la cual vienen peleando hace más de cuatro años.
“No pensamos que iba a ser tan positiva la reunión. Se han tomado muchos cambios que proponíamos y que hacen al espíritu de fondo de nuestro proyecto”, graficó Marisol Salvador de la Coordinadora de Acompañantes Terapéuticos de la Provincia de Buenos Aires (CoPAT).
Los diputados que integran la comisión unificaron tres textos, dos de ellos presentados por los trabajadores y uno de autoría de la radical Liliana Denot, y trabajaron en pulir la redacción definitiva de la norma que la semana que viene obtendría dictamen de mayoría.
“Fue positivo ya que pudimos esta presentes varias asociaciones y allanar diferencias. Quedaron algunos detalles pero no tenemos objeciones”, apuntó Alejandra Pereyra, de la Asociación de Acompañantes Terapéuticos de la Republica Argentina (AATRA).
En rigor, el debate no fue de contenido –todas las bancadas coincidieron en la importancia de la sanción de la ley- sino que se trabajó sobre diferentes aspectos relacionados con la técnica legislativa.
Una de esas discusiones giró sobre mencionar o no las incumbencias de los acompañantes, también se eliminaron algunos párrafos del artículo 5, se unificaron algunos incisos del artículo 6 y otros se volverán a redactar.
Un punto a destacar es que se incluyó en el texto un aspecto vinculado a la problemática salarial de los trabajadores dejando sentado el “derecho a percibir honorarios, aranceles y salarios que hagan a la dignidad profesional”.
Otro aspecto clave que prevé la normativa es que las instituciones tanto públicas como privadas de la salud deberán incorporar en sus equipos interdisciplinarios la figura de los acompañantes terapéuticos.
En esta dirección, también se reconocerá a los trabajadores “que no posean título habilitante o no estén comprendidos en las resoluciones del Ministerio de Salud de la Nación”. Para ello “deberán acreditar antecedentes de formación y de experiencia profesional mediante una evaluación de competencias”.
El proceso de evaluación estará a cargo de la Comisión Evaluadora del Ministerio de Salud de la Provincia que contará con representación de acompañantes terapéuticos.
