Luego del pico inflacionario de marzo, cuando el índice de precios trepó 4,7%, las estimaciones privadas echaron por tierra la posibilidad de un alivio en las góndolas y evalúan que en abril, por la suba del dólar, el indicador superará el 4%.
Asimismo, la suba del tipo de cambio de esta semana pondría un piso más alto a la inflación de mayo que se especulaba en un 3%. Otro de los factores que impulsaron el alza fueron las remarcaciones que hicieron las empresas por el programa precios esenciales.
“Para abril tenemos una inflación en torno del 4%, para mayo estábamos en 3%, pero dada la volatilidad cambiaria y la presión que se pueda generar por el aumento del combustible, se puede volver a acelerar por lo el 3% quedará corto”, aseguró el economista Nicolás Crespo de la consultora Elypsis.
En lo que va del año, la inflación acumula cerca de un 15% y en comparación con la variación interanual, registra una suba superior al 55 % respecto al mismo período del 2018. Así, según el registro de los economistas, el acumulado es el porcentaje más alto desde la “hiperinflación” del gobierno alfosinista.
En este sentido, Crespo sostuvo que “si comparamos con procesos inflacionarios de 2014, lo que podemos ver es que tenías dólar controlado, tarifas planas, todos componentes que pesan bastante a la hora de definir el registro inflacionario, y eso es lo que no tenemos ahora y nos trae registros más altos”.
Por último, el consultor consideró que las empresas podrán mantener el abastecimiento de los productos comprendidos en la canasta de precios Esenciales debido a que las compañías adelantaron los valores. “Lo cual le da cierto colchón para estar esos seis meses abasteciendo y no tener pérdidas”, cerró.
