La visita de María Eugenia Vidal al hospital Dr. Marío Larraín, de Berisso, generó una verdadera sorpresa entre los vecinos y trabajadores del nosocomio. La mandataria monitoreó junto al intendente Jorge Nedela las obras en la guardia de calle 5 y 166, que están cerca de finalizar.
Las obras comenzaron luego de que el doctor Alfredo Zanaroni se hiciera cargo de la dirigencia del Larraín. Entre las incorporaciones más relevantes habrá un ingreso de la ambulancia directamente a un shock room, que tendrá camillas de última tecnología con monitores, respiradores, equipos de oxígeno y de aire comprimido.
“Se contará con una sala de espera para quienes accedan a realizar consultas por sus propios medios que estará digitalizada y computarizada, en la que el paciente una vez que ingrese se lo catalogará de acuerdo a su patología y a la gravedad que presente”, detalló Zanaroni.
Pero la inesperada llegada de Vidal no cayó bien a todos los sectores. Los trabajadores del nosocomio opositores al gobierno de Cambiemos, fueron muy críticos son la presencia de la Gobernadora y el ministro de Salud, Andrés Scarsi, en su espacio de trabajo.
Según detallaron desde la comuna, el espacio también albergará también dos salas de internación para los casos que se atiendan en la Guardia. Por otra parte, se instalarán ascensores, una sala de espera totalmente digitalizada que entre otras cosas indicará el tiempo de espera.
