Ocho minutos de un discurso grabado en la Quinta de Olivos le bastaron a Mauricio Macri para desdecir la mayoría de las palabras que pronunció en la conferencia de prensa del lunes, en la que culpó a los votantes y a la oposición por la megadevaluación del 25% del peso.
“Pido disculpas por lo que dije, dude en hacer la conferencia porque todavía estaba muy afectado, sin dormir y triste, pero prioricé atender a la prensa para calmar ansiedades, entendí el resultado de las elecciones y respeto a los que no nos acompañaron”, se victimizó el Presidente frente a cámara.
Un dato central es que el mensaje fue leído por Telepronter y grabado, para evitar desbordes emocionales de Macri, como los que protagonizó el lunes. “Que no nos hayan acompañado fue exclusivamente responsabilidad mía y de mi equipo”, dijo el primer mandatario que el domingo perdió por 17 puntos.
En la dirección contraria a horas de las elecciones había apuntado contra los votantes y un Gobierno que todavía no llegó al poder. Por ese motivo, Macri buscó dar vuelta los argumentos y ponerse en lugar de los Argentinos “que sintieron lo que les pedí como trepar el Aconcagua”.
“Hoy están agotados, cansados, enojados, y muchas veces llegar a fin de mes se transformó en una tarea imposible. Cuando arrancamos en el 2015 pensamos que iba a ser más fácil, haciendo una autocrítica se que el día a día terminó siendo una exigencia aterradora”, agregó.
Asimismo, antes de detallar el paquete de medidas que intentarán mitigar la destrucción del salario real por los efectos de la devaluación dijo que había llamado a “algunos candidatos” y que quiere “conversar” con ellos y no “entendernos como enemigos”.
