Si bien muchos municipios de la Provincia ya han avanzado en este sentido, en Pilar fueron más allá y el Frente de Todos logró sancionar la declaración de emergencia en casi todas las áreas.
Así, se alcanzó la herramienta de gobierno en medio de la polémica porque el voto en el Concejo Deliberante se logró sin la presencia del bloque de Juntos por el Cambio y sólo estuvieron los ediles peronistas y el concejal Miguel Gamboa, quien formó un unibloque.
"Recibimos un Municipio en estado crítico que no puede dar respuestas a problemas fundamentales. Nosotros no vamos a someter a los pilarenses a seguir viviendo en el abandono. Nos comprometimos a recuperar un Estado presente”, dijo el intendente Federico Achával.
Esta fue una de las primeras iniciativas que elevó al cuerpo deliberativo el alcalde peronista desde que asumió el cargo en reemplazo del macrista Nicolás Ducoté el 10 de diciembre. En septiembre ya se había aprobado la emergencia económica.
Ahora, el paquete de la ordenanza avanzó en materia social, sanitaria, de seguridad, productiva, presupuestaria, administrativa, financiera y de servicios públicos.
“Nuestra agenda de prioridades está puesta en atender el hambre, la pobreza, la inseguridad y la falta de acceso a la salud que sufren los pilarenses. Se trata de derechos fundamentales que como Estado no podemos poner en riesgo”, aseguró Achával.
De esta manera, Pilar siguió los lineamientos que el propio gobernador bonaerense, Axel Kicillof, utilizó para declarar un paquete de emergencias a nivel provincial, hecho que logró la semana pasada después de arduas negociaciones con la oposición en la Legislatura.
