Luego de la polémica que se generó en torno al otorgamiento de prisiones domiciliarias por la pandemia de coronavirus (Covid-19), el Gobierno provincial anunció que construirá unidades sanitarias en las cárceles bonaerense.
Desde Gobernación aseguraron que apuraron los planes de obras para atenuar la situación de hacinamiento y superpoblación en el sistema penitenciario, en medio del avance de la pandemia en todo el territorio.
Según informaron, uno de los programas es el de la construcción de 16 unidades sanitarias y 6 centros de aislamiento que tienen capacidad para 750 pacientes que eventualmente contraigan COVID-19. Arrancará en junio y prometen terminarlas antes de finales de ese mes.
En este contexto, lo que intenta lograr el gobernador Axel Kicillof es evitar que los detenidos que estén contagiados generen focos que, dentro de los pabellones hacinados, resultarían incontrolables.
Las cárceles bonaerenses tienen plazas para 24 mil personas, pero hay casi 50 mil detenidos. Cuando llegó el virus al país, esa situación expuso al sistema penitenciario como un polvorín que podría estallar en contagios si ingresaba allí.
No obstante, a principios del mes de marzo, en la provincia se fortalecieron los controles sanitarios, se suspendieron las visitas de los familiares y se reforzó el área de salud del sistema penitenciario.
Pero además, el vicepresidente del Tribunal de Casación, Víctor Violini, firmó un fallo en el que instó a los jueces a facilitar el otorgamiento de prisiones domiciliarias a detenidos que estén dentro del grupo de riesgo.
La decisión del juez estaba destinada en un principio a personas que hayan cometido delitos leves, pero luego se confirmó que también recibieron ese beneficio violadores, asesinos y abusadores, que generó un escándalo en la sociedad que obligó a la intervención del Presidente y el Gobernador.
Además, ante el reclamo de los familiares de los convictos, Kicillof anunció el 5 de mayo un plan de ampliación de 1350 plazas en diferentes unidades y se comprometió a hacerlo entre junio y octubre.
Mientras tanto, la Corte Suprema de Justicia resolvió el 11 del corriente revocar el hábeas corpus colectivo resuelto por Casación para activar las prisiones domiciliarias.
Además, los ministros de la Corte bonaerense plantearon la necesidad de rever políticas criminales vinculadas con el régimen carcelario, y apuntaron otra vez las políticas en el Poder Ejecutivo y en la Legislatura.
En este marco, fue que desde la oposición presionaron con una propuesta de la diputada Carolina Píparo para llevar hospitales modulares a los penitenciarios, acción que se terminaría de concretar en el corto plazo.
“Lo que nunca puede ser viable es la liberación, cuando la solución es hacer más cárceles, porque ha crecido la población. Hay pocos recursos y poca voluntad política de los principales referentes para que el preso esté en condiciones dignas”, había advertido la legisladora platense.
Esto es lo que el Gobierno provincial debería haber hecho desde el día 1 de la pandemia para garantizar la salud de los reclusos en nuestra Provincia y no poner en riesgo al resto de la sociedad. https://t.co/xa50oUXjfU
Abro hilo ?— Noelia Ruiz (@NoeliaRuiz1) May 22, 2020
En esa misma línea, su par en la Cámara baja bonaerense, Noelia Ruiz afirmó en su cuenta personal de Twitter que “esto es lo que la Provincia debería haber hecho desde el día 1 de la pandemia para garantizar la salud de los reclusos y no poner en riesgo a la sociedad”.
Para ello, argumentó que este miércoles, un hombre de 20 años que cumple arresto domiciliario en su casa de Glew fue denunciado por su novia, de 19 años, tras haber recibido una golpiza.
La Fiscal solicitó la detención efectiva del agresor pero el Juez que lleva adelante la causa rechazó la solicitud, de modo que el muchacho continuará cumpliendo la condena en su casa.
“Espero que este anuncio se haga realidad cuanto antes, en el marco de la emergencia en violencia familiar y por razones de género y diversidad en que se encuentra la Provincia”, concluyó Ruiz
