El presidente Alberto Fernández volvió a advertir este viernes sobre la posibilidad de una segunda ola de contagios por coronavirus (COVID-19) en el país, pero sostuvo que la Argentina cuenta con la "ventaja que seguramente podremos contar con las vacunas".
"Eso nos permitirá enfrentar esa segunda ola mejor armados y con un 25% de la población inmunizada", dijo el Presidente en declaraciones formuladas esta mañana. Además, ratificó que "entre enero y febrero serán vacunadas 10 millones de personas".
Uno de las vacunas para combatir la pandemia que se aseguró el Gobierno nacional es la denominada Sputnik V, producida en Rusia y cuyo informe preliminar demostró un 95% de efectividad.
"La singularidad de la vacuna radica en el uso de dos vectores diferentes basados en el adenovirus humano, lo que permite una respuesta inmune más fuerte y a más largo plazo en comparación con las vacunas que utilizan un mismo vector para dos dosis", informaron desde el laboratorio ruso.
Bajo ese contexto, el Ejecutivo acordó a principio de mes la compra de 25 millones de dosis de la Sputnik V, que se aplicarían en dos oportunidades y las cuales llegarían a la Argentina entre diciembre y enero.
Por otro lado, el laboratorio británico AstraZeneca y la universidad de Oxford anunciaron el lunes que la vacuna contra el coronavirus que desarrollaron mostró "una eficacia del 70%" en base a las pruebas preliminares realizadas.
Esta vacuna -cuyos ensayos clínicos se realizan, entre otros países, en Reino Unido y Brasil- tiene sin embargo una eficacia mucho menor a la de cerca del 95% anunciada para las vacunas producidas por sus rivales Pfizer/BioNTech y Moderna.
El motivo se debe a que utiliza una tecnología más tradicional que la de sus dos competidores, lo que la hace menos costosa y más fácil de almacenar, ya que no necesita ser conservada a una temperatura muy baja. De todas maneras, el Gobierno adquirirá 22 millones de dosis.
En tanto, el laboratorio norteamericano Pfizer puso a disposición del país la entrega de una partida de un millón de dosis del medicamento para combatir la pandemia y que se encuentra en fase tres de investigación en Argentina.
Sin embargo, tiene una complicación que la hace de difícil manejo, ya que exige que durante su distribución se mantenga bajo una cadena de frío de -80 grados, lo que implica el desarrollo de una infraestructura especial no solo para preservarla, sino también para su traslado.
