Después de que el Gobierno nacional anunciara el acuerdo para mantener 10 cortes de carne a “precios populares”, el presidente de la Cámara de la Industria y Comercio de Carnes (CICCRA), Miguel Schiariti, advirtió que la medida “no tendrá impacto en el bolsillo de la gente” y anticipó que la cantidad de “no cubrirá la demanda”.
“En realidad es un gran esfuerzo por parte de los exportadores. Como medida me da la sensación que no va a tener mayor trascendencia, como no lo tuvo la oferta que hicieron para Navidad”, afirmó el dirigente a Diputados Bonaerenses.
En el convenio, entre los Ministerios de Desarrollo Productivo y Agricultura, el Consorcio de Exportadores de Carnes Argentinas y la Asociación de Supermercados Unidos, retrotrae los precios a noviembre de 2020, con bajas de hasta el 30%, hasta el 31 de marzo. Además, habrá bocas de expendio en los supermercados y el Mercado Central.
Para Schiariti, la cantidad de kilos de carne no será suficiente para cubrir la demanda en un contexto de crisis social. Por otro lado, el presidente de la entidad cárnica afirmó que los cortes se van “a comercializar exclusivamente en supermercados y la gente de escasos recursos por lo general compra en comercios de cercanía”.
Vale recordar, que el INDEC estimó una suba de 5,1% en diciembre de 2020 y un aumento acumulado durante todo el año del 45,5% en la Canasta Básica Alimentaria, que incluye, entre otros, a la carne. En este sector se registraron subas de entre 10,9% y hasta 28%, en el caso del asado.
Con todo, Schiariti pronosticó que la primera quincena de febrero los precios van a disminuir. “Si tomamos la última semana de diciembre y las tres semanas de enero, vemos que el precio de la hacienda bajo entre el 5% y 7% porque se normalizo la oferta y porque el consumo ya no convalida más cualquier aumento de precios. Se pone difícil vender y si se vende menos, cae el precio. De continuar de esta manera, seguramente se traslade al mostrador en la primer quincena de febrero”, afirmó el referente de CICCRA.
Por otra parte, Schiariti explicó que la pandemia produjo cambios de hábito en el consumo, ya que el dinero que antes se ocupan en vestimenta o en la escuela de los chicos ahora se usa para comprar alimentos. Basado en esto, el referente cárnico argumentó que en noviembre por la apertura de diversas actividades creció mucho la demanda de carne.
Respecto a los aumentos de la carne, el dirigente mencionó la suba en el precio del maíz que sirve como alimento para el ganado y los impuestos que se cargan a los productores. En referencia al primero, afirmó que en marzo el maíz costaba $9 y hoy sale $20, una duplicación en el precio para alimentar a los animales.
Sobre los impuestos, Schiariti argumentó que el 39% del valor de la carne pertenece a impuestos nacionales. “Quiere decir que algo que cuesta 100 pesos podría costar 61. Estoy hablando de impuestos nacionales, y lo que es una brutalidad es Ingresos Brutos. Cualquier ingreso de 2,2% que son las alícuotas de las provincias en el proceso, en los eslabones de la cadena que normalmente en el sector de la carne son 4 o 5, al sector de la carne le ponen entre 8 y 10 puntos al precio de la carne. Es una grosería”, dijo el dirigente.
EL ACUERDO
De acuerdo a lo pautado por el Gobierno y los representantes de la carne, el Ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas, afirmó que la medida estará disponible en todo el país la semana que viene en, aproximadamente, 1.500 y 1.600 bocas de expendio a las que se suma el Mercado Central que venderán 10 cortes a “precios populares”. El convenio durará todo el año y se llevará a cabo los primeros tres miércoles de cada mes y los fines de semana.
Por su parte, el titular de la cartera de agricultura, Luis Basterra, afirmó que están pautadas “3.000 toneladas mensuales de los frigoríficos y 3.000 de los supermercados, llegando a 6.000 toneladas en total”. En ese sentido, destacó la articulación entre el Gobierno y los sectores cárnicos y de supermercados que “favorecen el consumo de carne sin descuidar el comercio exterior”
