Los jugadores del club Vélez Sarsfield, Thiago Almada y Miguel Brizuela, quedaron imputados en la causa que los investiga por abuso sexual durante una fiesta que habrían organizado a fines del año pasado junto a varios integrantes del plantel.
El principal imputado del caso es el extécnico del ascenso Juan José Acuña que continúa prófugo de la justicia y, hasta el momento, no había ningún jugador involucrados del caso ya que todos los deportistas habían sido desligados de la causa.
Al finalizar la feria judicial, la víctima se volvió a presentar declaración y relató que ella accedió a tener relaciones sexuales consentidas con Almada pero que, pese a su negativo, luego ingresó Brizuela. Allí fue que los señaló a ambos como autores del abuso lo que derivó en la acusación formal de los futbolistas.
Según su testimonio, en la casa del jugador Juan Lucero le ofrecieron alcohol y drogas varias veces, le robaron la cartera y el celular para que no diera aviso a la Policía. Además, la joven sospecha que pudieron haberla drogado para dejarla inconsciente y así cometer los abusos.
Vale destacar, que Lucero, Almada, Brizuela y Ricardo Centurión, quien fue invitado a la fiesta, se pusieron a disposición de la Justicia a fines del año pasado y declararon en la causa que tiene a Acuña, con pedido de captura, como único imputado.
“La habitación estaba cerrada con llave entonces toco la puerta, no me abren y es ahí donde bajo y empiezo a gritar y nadie me ayuda”, relató la amiga de la víctima que fue encontrada desmayada “con una jarra de plástico en la mano y al Pelado (Acuña) saliendo mientras se subía los pantalones y se reía".
La versión de la mujer se conoció después de que Lucero desmintiera que en la casa hubiera habido una fiesta. El delantero también defendió al extécnico sobre quien dijo que "la está pasando muy mal" con la acusación en su contra.
