viernes, marzo 29, 2024

2 de abril: cómo empezó la causa judicial por torturas a soldados en Malvinas

La investigación reúne denuncias de estaqueos, enterramientos y otras vejaciones a excombatientes que lucharon en el conflicto bélico.

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En el día del Veterano y de los Caídos en la Guerra de Malvinas, hace 39 años, el abogado Pablo Vassel, ex subsecretario de Derechos Humanos de Corrientes relató cómo inició el proceso de recopilación de casos de torturas que terminó en la causa judicial en la que es denunciante.

Se trata de una causa judicial por torturas a soldados durante la guerra de Malvinas, donde varios excombatientes del conflicto bélico iniciado el 2 de abril de 1982 denunciaron estaqueos, enterramientos y otras vejaciones mientras estuvieron en la Isla.

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En esa línea, Vassel, quien ocupó la subsecretaría de Derechos Humanos de Corrientes entre 2004 y 2008, comenzó a investigar esos episodios a partir de la proyección del film "Iluminados por el fuego" en esa provincia.

La película, dirigida por el actual ministro de Cultura nacional, Tristán Bauer, se compartió junto al testimonio del periodista y ex combatiente en Malvinas Edgardo Esteban, junto a otro veterano de la guerra, ya fallecido, Orlando Pascua.

Aquella proyección en agosto de 2005 en el cine Colón de Corrientes. Cuando terminó la película, el auditorio permaneció en silencio y con "un impacto muy fuerte", recordó Vassel.

"Nadie se podía mover del cine, durante diez minutos todo el mundo se quedó quieto y algunos lloraban”, sostuvo el abogado sobre esa ocasión. Tras ver "la conmoción" que sentían los veteranos que habían asistido con sus mujeres e hijos, Vassel organizó un asado para los ex combatientes.

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En esa cena, realizada en la sede del gremio ATE, el entonces funcionario preguntó a los exconscriptos qué les había parecido la película, en la que se mostraban tropas con hambre y la aplicación de tormentos a un soldado.

"Y muchos me dijeron esto: 'es muy buena pero lo que muestra se queda corto'. Ahí me empecé a preguntar: ¿qué es quedarse corto?", relató Vassel sobre el momento en que los veteranos correntinos empezaron a relatar las vejaciones que sufrieron en la Guerra.

Desde ese momento, y a lo largo de dos años, el abogado viajó por distintos puntos de la provincia para reunirse con ex combatientes y reunir testimonios para denunciar judicialmente lo que habían vivido en las islas.

 

Pablo Vassel, abogado denunciante.

 

Por lo mismo, el letrado sostuvo que "algunos quisieron dar sus testimonios y que fueran presentados en la Justicia, otros simplemente me informaron lo que pasó, para que yo supiera, pero prefirieron no dar sus testimonios”.

La recorrida para recopilar casos de tormentos aplicados por oficiales y suboficiales concluyó, según Vasssel, con "23 testimonios originales, con 5 que habían sido víctimas de torturas y 15 que habían sido testigos de las torturas sufridas por camaradas suyos”.

“Otros daban cuenta de la muerte de dos soldados por hambre, y otros que referían al asesinato de un soldado correntino que había recibido un disparo en la cabeza por un cabo en una pelea casi de guapos, imposible de ser asimilada a un error bélico", manifestó el abogado denunciante.

 

Veteranos de guerra, durante la vigilia del 2 de abril.

 

En ese marco, el abogado afirmó que “todos los testimonios fueron desgrabados, palabra por palabra, incluso con las expresiones correntinas que vienen del antiguo guaraní”.

Al respecto, Vassel puntualizó que le parecía “fundamental que aquellos soldados de la patria que nunca habían sido escuchados fueran, por fin, extremadamente escuchados, y respetadas sus opiniones".

Esta información constituyó la base documental de la denuncia que el letrado correntino presentó en 2007 en el Juzgado Federal de Río Grande, provincia de Tierra del Fuego.

 

 

En esa provincia se abrió la causa 1777/07 que ya lleva 14 años, a cargo de la jueza federal Mariel Borruto. En ese sentido, Vassel explicó que “presentar la denuncia en el juzgado de Río Grande fue un acto de reivindicación de la soberanía argentina”.

“Se buscaba que un juez argentino aplique la ley argentina por hechos que sucedieron en territorio argentino contra víctimas argentinas. Y lamentablemente cometidos por victimarios argentinos", remarcó el abogado respecto a la denuncia en la Patagonia.

Sobre las torturas y vejaciones que constató en la investigación y que luego volcó en la denuncia, el abogado dijo que "la más usual era el estaqueo, que consistía en atar a estacas a soldados con los tientos de las carpas para que queden inmovilizados”.

 

 

Además, el letrado denunciante profundizó que el tormento se les realizaba “a veces semidesnudos, otras veces vestidos, incluso algunos estaqueos fueron bajo cañoneo enemigo".

Otra práctica de castigo solían ser "los enterramientos", o sea "cavar pozos y enterrar a soldados hasta el cuello, casi a la usanza de Roca en la Campaña del Desierto a fines del siglo XIX", detalló el abogado respecto a los testimonios que recolectó.

En la mayoría de los casos, dijo Vassel, los castigos o vejaciones eran impuestos por "motivaciones famélicas, o sea el hambre extremo", aunque también comprobó otro tipo de torturas.

 

 

"A los soldados de regimientos patagónicos los descalzaban, les mojaban el pie y con el teléfono de campaña, se accionaba una pequeña manivela para generar una picana eléctrica en el medio del campo", describió el abogado sobre el ingenio cruel de los oficiales del Ejército para ejercer torturas en los excombatientes.

También hubo torturas aplicadas por antisemitismo, "por lo menos en tres argentinos de religión judía que fueron torturados mientras se los trataba de 'judío de mierda'", señaló Vassel.

En estos casos, las violaciones a los Derechos Humanos ocurrieron en regimientos de la provincia de Buenos Aires y no de Corrientes, y se produjeron vejaciones a jóvenes "provenientes de pueblos qom o moqoit del Chaco y Formosa”.

 

Muchas de las tumbas de soldados caídos en Malvinas todavía no tienen identificación.

 

Al referirse a la causa judicial, Vassel cuestionó "el ritmo exasperadamente lento" en que se fueron disponiendo las distintas medidas procesales, aunque reconoció que el expediente "avanza pese a todas la dificultades".

En ese contexto, el letrado subrayó que entre el 13 y el 15 de abril próximos prestarán declaración indagatoria "seis altos oficiales responsables de esos hechos". Uno de ellos es el ex general de brigada Omar Parada.

Al momento de la Guerra de Malvinas, Parada se desempeñaba como jefe del comando de la Tercera Brigada de Infantería de Corrientes y en Malvinas estuvo afincado en Puerto Yapeyú, un pequeño puerto ubicado en la isla Gran Malvina, sobre el estrecho de San Carlos.

La declaración de Parada, de 94 años, está prevista para el 13 de abril a las 11:00 horas. Sobre su testimonio, Vassel seguró que el hombre “no sólo convalidó la decisión de torturar a soldados sino que él mismo dio órdenes efectivas de torturar a soldados".

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