Las cifras de contagios por la pandemia de coronavirus (Covid-19) no disminuyen y en base al último parte epidemiológico emitido por el Ministerio de Salud nacional, el 62,4% de los fallecimientos se produjo el último mes, entre el 18 de julio y este martes 18 de agosto.
De esa manera, el total de personas que perdieron la vida en la Argentina es de 5.877, según las cifras reportadas por la cartera sanitaria esta mañana, mientras que hasta hace un mes atrás, se habían registrado un total de 2.204 decesos, menos de la mitad de los que se contabilizaron hoy. En rigor, las muertes crecieron un 166% en el último mes.
No obstante, pese al incremento en el número de fallecimientos, las autoridades sanitarias destacan que la tasa de mortalidad, 128 personas por cada millón de habitantes, y el índice de letalidad, 1,9% sobre los casos confirmados, continúa entre los más bajos de la región, solo después de Uruguay y Paraguay.
Ante este contexto, ayer se llevó a cabo una manifestación anticuarentena en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA), uno de los distritos más vulnerados por el nuevo virus y que se replicó en todo el país, lo cual motivó a que las autoridades sanitarias adviertan que “lo peor aún no pasó”.
“Las comparaciones no son odiosas cuando nos permiten poner en dimensión lo que nos pasa en Argentina y es importante analizar cómo viven hoy con el coronavirus la mayoría de los países del mundo, lo cual demuestra que lo peor de la pandemia no pasó y nadie volvió a la normalidad”, resaltó el ministro de Salud bonaerense, Daniel Gollán.
Un dato no menor, es que este domingo y a pesar del banderazo anticuarentena, desde el Gobierno Nacional confirmaron que el Área Metropolitana (AMBA) estuvo por primera vez en porcentajes por debajo del 80% en cantidad de pacientes en unidades de atención crítica y en nuevos casos reportados.
Según las cifras oficiales, 1.749 personas cursan la enfermedad en unidades de terapia intensiva en todo el país, el 78,6% de ellos en establecimientos de la Ciudad y de la Provincia. En tanto, la ocupación de camas de cuidados intensivos, más allá de la dolencia que explique la internación del paciente, a nivel nacional promedia el 58,2%, mientras que en el AMBA llega al 67,6%.