El Ministerio de Producción nacional confirmó que desde agosto de 2018 hasta la misma fecha de este año, se perdieron 140 mil puestos de trabajo formales, una de las cifras más preocupantes del Gobierno de Mauricio Macri.
Según los datos del Sistema Integrado Previsional Argentino (SIPA), “se contabilizaron 12.106.981 trabajadores registrados en todo el país, lo que representó una merma de 125 mil fuentes de trabajo (- 1%) interanual, y una mejora de 0,1% respecto a julio”.
“Esa cifra fue atenuada por la incorporación de trabajadores en el ámbito estatal y monotributistas sociales. Tras la devaluación post PASO el escenario de crisis se ha agudizado por lo cual se puede prever un mayor deterioro de todos los indicadores”, indicó el informe de la cartera laboral.
Los sectores que se vieron mayormente afectados según el informe, fueron la industria manufacturera con una baja del 4,9%; comercio con una merma del 3,7% y transporte, almacenaje y comunicaciones con una caída del 3,2%.
En tanto, las provincias que sufrieron con creces la pérdida del empleo formal en el sector privado, fueron Tierra del Fuego un 10,2%, Catamarca un 6,9%, La Rioja un 5,6%, Formosa un 5,4%, Santiago del Estero un 5%, Chaco un 4% y San Juan un 3,6%.
Estas cifras son preocupantes, si se tiene en cuenta que el aumento de la desocupación, como también el cierre de industrias y comercios durante la administración de Cambiemos seguirá aumentando, en plena transición con la próxima gestión.
Bajo este contexto, el próximo presidente electo por el Frente de Todos, Alberto Fernández, deberá asumir el próximo 10 de diciembre y por ese motivo, tendrá como objetivo apuntar a un pacto social entre gremios y empresarios para revertir este panorama.
