El presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, definió este martes avanzar en la conformación de las comisiones para tratar el paquete de reformas conocidas como “Ley Ómnibus” que presentó el Ejecutivo nacional para tratar en las sesiones extraordinarias.
A pesar de los pedidos que le hicieron llegar desde los diferentes bloques de la oposición, respecto de la cantidad de comisiones que deberían debatir la Ley Ómnibus, Menem decidió habilitar solamente cuatro, todas presididas por el oficialismo o por diputados alineados con la Casa Rosada.
De esta manera, el presidente de la Cámara Baja definió habilitar la comisión de Presupuesto y Hacienda, que sería presidida por el diputado José Luis Espert de Avanza Libertad, y Relaciones Exteriores a cargo de Fernando Iglesias del PRO.
En tanto, las otras dos comisiones que habilitó el presidente de la Cámara de Diputados, que son las de Asuntos Constitucionales, estará a cargo del diputado libertario, Nicolás Mayoraz, y la Legislación General que será presidida por el también integrante de La Libertad Avanza, Gabriel Bornoroni.
Es preciso señalar que, estas últimas dos comisiones son de vital importancia para dictaminar sobre los aspectos constitucionales del mega proyecto de ley enviado por el presidente, Javier Milei, la semana pasada, que contiene más de 600 artículos para reformar el Estado.
En este contexto, La Libertad Avanza busca acuerdo con otros sectores de la oposición en especial con el PRO y la Unión Cívica Radical (UCR) para poder avanzar e imponerse al bloque del peronismo disidente, Unidad Federal.
“Menem se tiene que apurar, porque (Victoria) Villarruel avanza en el Senado, negociando con el PRO y la UCR, para conseguir votos, correr a los kirchneristas con el objetivo de conseguir su primera ley, lo que pesas dentro de la interna del gobierno”, explicó un operador parlamentario.
Es que, en el Senado de la Nación, la vicepresidenta Victoria Villarruel ya conformó las comisiones y el miércoles buscará dictaminar el proyecto de ley de Boleta Única de Papel, para una semana más tarde llevarlo al recinto y así, obtener la primera victoria parlamentaria del Gobierno.
Por todo ello, Menem comienza a hilvanar alianzas con Avanza Libertad, el PRO y algunos legisladores de Juntos por el Cambio para apurar cuanto antes el debate de la Ley Ómnibus en Diputados, a pesar de generar varias quejas de parte de los bloques de la oposición.
Lo que sucede es que, desde la UCR ya habían adelantado que un estudio preliminar de la norma que tiene más de 600 artículos debía ser debatida “por no menos de 20 comisiones”. Algo similar había adelantado Miguel Ángel Pichetto presidente de Hacemos Coalición Federal.
Por otro lado, el oficialismo también deberá enfrentar al bloque de Unión por la Patria que no preside ninguna de las comisiones a pesar de tener el 40% de los diputados de la Cámara Baja.
A esto se le suma que el presidente del bloque de Unión por la Patria, Germán Martínez, presentó una denuncia para que el presidente Javier Milei vaya a la Justicia a declarar respecto de sus dichos de los legisladores que reciben “coimas”.
Ahora, con las comisiones ya anunciadas, empieza un nuevo proceso que es el de la negociación del proyecto de ley. Desde la Casa Rosada no se muestran muy permeables a modificaciones del proyecto y aseguran que no se debe a una intransigencia sino que “todo está relacionado”.
Esta estrategia “a todo o nada”, que el propio Milei se encargó de profundizar cuando amenazó con recurrir a un plebiscito si no conseguía apoyo legislativo, genera preocupación en la oposición.
Es que, los espacios dialoguistas, como el radicalismo y Hacemos Cambio Federal, consideran que el proyecto es inabarcable en tan poco tiempo y también adelantaron que hay puntos “invotables”, como la delegación de facultades, las retenciones, la actualización automática de las jubilaciones y algunas privatizaciones.
“Estamos viendo cómo salimos de este juego de la gallina (ver quién se echa atrás primero)”, reconoció un diputado radical, en la antesala a las tensas negociaciones que se llevarán a cabo en el recinto de la Cámara Baja, con el paro nacional y la movilización de la CGT de fondo.