A pesar de su desmentida, crecen las versiones que alimentan la salida del jefe de Gabinete, Nicolás Posse, del Gobierno. Los nombres en danza para su reemplazo.
A pesar de ser desmentido categóricamente por el vocero presidencial, Manuel Adorni, este sábado crecieron las versiones desde Casa Rosada, que alimentan la salida del jefe de Gabinete, Nicolás Posse, del Gobierno previo a la reanudación del debate de la Ley Bases en el Senado nacional.
Es que, desde los pasillos de la Casa Rosada, un funcionario con peso dentro de la administración mileísta reconoció que “en estos momentos” se necesita como jefe de Gabinete a alguién “más vocero, con más exposición”. De esta manera, la salida de Posse es prácticamente un hecho, por lo que solo restaría definir el momento.
Lo cierto es que, Posse encabezó este jueves la reunión de ministros semanal pero la misma tuvo ausencias llamativas, incluidas las del jefe de Estado y su hermana, Karina Milei. En ese marco, fueron creciendo a lo largo de la mañana los rumores de que la ausencia del jefe de Ministros al show de Milei en el Luna Park no habría caído bien dentro de la mesa chica libertaria.
Además, distintas voces aseguran que el poder de decisión de Posse se fue recortando paulatinamente y que ya no define los nombramientos en el organigrama como al comienzo. Todo esto mientras florecen veladas críticas internas hacia su trabajo, entre los que se encuentran los aumentos de sueldos en el Poder Ejecutivo.
En ese sentido, la señalada es “El Jefe” como la principal detractora del trabajo de Posse. Entre los cuestionamientos que haría Karina Milei se encuentra la demora en los tiempos de la gestión, principalmente en lo que respecta a designaciones oficiales, con un promedio de renuncia de un funcionario cada seis días, y la falta de intervención en las negociaciones políticas, en lo que tiene que ver con la Ley Bases y el Paquete Fiscal.
En concreto, ante la falta de cintura para ordenar esas negociaciones, los diálogos políticos los tuvo que llevar adelante el ministro del Interior, Guillermo Francos. Sin embargo, desde la administración mileista machacan que los mismos no están dando demasiados resultados, a la vista del trabado dictamen de la Ley Bases en la Cámara de Senadores.
A este escenario complejo, se suma el avance de Posse sobre los demás ministerios lo que genera recelos de sus colegas de Gabinete. En detalle, primero desguazó el súper ministerio de Infraestructura que comandaba Guillermo Ferraro, luego le quitó el manejo de la caja con las provincias al Ministerio del Interior y hasta paralizó el funcionamiento de Capital Humano, a cargo de Sandra Pettovello, por falta de fondos.
Asimismo, desde la mesa chica de la administración libertaria, hay malestar porque Posse tampoco pudo maniobrar para desactivar la marcha nacional por la educación pública, ni prever su alcance, así como los dos paros nacionales que llevó adelante la Confederación Nacional del Trabajo (CGT).
En ese contexto, Karina Milei ya estaría barajando una serie de nombres que lo sucederían en el cargo, entre ellos se destacarían el actual ministro del Interior, Guillermo Francos, al ser el hombre que está comandando las negociaciones del Gobierno con los diputados, gobernadores y sectores políticos disonantes al mileísmo. Sin embargo, el subsecretario de Gestión Institucional, Eduardo “Lule” Menem, es otro de los señalados.
No obstante, el primer candidato en ocupar la silla de jefatura ministerial es el no nombrado asesor presidencial, Federico Sturzenegger, quien se incorporaría formalmente a la gestión en caso de que la Ley Bases sea aprobada.
En detalle, el padre del decreto de necesidad y urgencia (DNU) 70/2023 es apuntado incluso por el propio Milei como el hombre ideal para llevar adelante las profundas reformas del Estado que el libertario aspira concretar durante su gestión, una tarea que el economista puede ejecutar sin restricciones desde las facultades que le otorgarían la jefatura de gabinete.
Aunque no dan por descartada esta opción, cerca del jefe de Estado admiten que el ex presidente del Banco Central funcionaría mejor en un área técnica que le permita poner en marcha las privatizaciones. De efectivizarse la aprobación de la batería de reformas que le darían luz verde al gobierno para llevarlas adelante, el gobierno no descarta crear un virtual Ministerio de Modernización para que aterrice Sturzenegger.