Exactamente a las 10.53 del sábado pasado, Diego Villanueva dijo sus primeras palabras en la Sede de la Fiscalía N°6 de La Plata sobre las circunstancias que llevaron a la muerte de su hijo. Hasta ahora, no había hablado ni con la Justicia, ni con la prensa.
Renzo falleció el último 10 de octubre al caer de una ventana de su departamento, ubicado en un séptimo piso. Por el hecho, Villanueva y su pareja, Rosa Martignoni, están acusados de los delitos de homicidio simple y homicidio calificado por el vínculo.
Las sospechas surgen de informe elaborado por la Policía Científica y la DDI de La Plata, en base a la reconstrucción de la caída del menor, que determinó que “necesariamente debió tener una velocidad inicial, producto de un impulso”.
En este sentido, Villanueva reafirmó ante el fiscal platense Marcelo Romero que se trató de un hecho accidental. “Estaba sacando unos juguetes de la pieza de él, cuando pasaron unos segundos y salgo a buscarlo y ahí que veo que se estaba cayendo”, relató.
Consultado por la posición de Renzo cuando advirtió la caída, dijo que “tenía los pies en el aire, no me dio tiempo a nada”. Villa Nueva intentó demostrar que su hijo se trepó al balcón mientras jugaba y se cayó.
“Mientras Renzo jugaba con una linternita que había encontrado, alumbrando y escondiéndose de una habitación a otra, nosotros hacíamos la mudanza. Quiero aclarar que Renzo iba y venía de pieza en pieza”, insistió.
Para apoyar su versión además presentó una serie de fotos. “Registran cuando yo lo llevaba a los juegos. Tenía fuerza, se trepaba todo el tiempo, tenía mucha fuerza en las manos”, declaró.
En tanto, para Angela Donato, madre de Renzo, no hay dudas de que el padre lo arrojó por la ventana, afirmación que respalda en las diferentes denuncias realizadas ante el Tribunal de Familia N°3 de La Plata y las dos perimetrales dictadas a lo largo de estos siete años.
“Siempre que vino de la casa de su papa vino golpeado y yo lo dije ante la Justicia. Nunca cuestionaron la violencia. Me decían que lo deje que no iba a pasar nada”, explicó semanas atrás Donato en diálogo con Diputados Bonaerenses.
Uno de sus abogados, Gastón Nicocia, también reforzó esta idea. “Hubo siete años de expedientes siempre sobre una base de violencia, básicamente en la relación paterno filial. Las perimetrales siempre fueron por motivos de violencia”, explicó el letrado.
Resta recabar otro testimonio que será clave en el avance de la causa. Rosa Martignoni, madrastra del chiquito, también deberá explicar que pasó la noche en que Renzo cayó del septimo piso. A partir de allí, la Justicia tendrá 15 días para definir la previsión preventiva de los dos acusados.
