Uno de los últimos boliches históricos de Mar del Plata empezó a ser demolido para convertirse en una estación de servicio. Se trata de Sobremonte, el icónico espacio de la noche marplatense, que había cerrado en 2019, por una orden de un juez y el aumento de los costos de los servicios.
El proceso de demolición del histórico boliche de avenida Constitución, Sobremonte, inaugurado en 1972 comenzó en los últimos días para dar inicio a la construcción de una estación de servicios, prevista para fines de marzo.
La nueva estación de servicios que estará en lugar de Sobremonte se comenzará a construir a fines de marzo en la manzana de 3.500 metros cuadrados emplazada en Constitución entre Carballo y Torre de Vera y Aragón.
Además, se estima que sobre las ruinas del reconocido boliche de Mar del Plata, Sobremonte, se desarrollará un paseo comercial que irrumpirá en la zona con distintas atracciones.
Más allá de la crisis económica que imposibilitó a los dueños de Sobremonte seguir adelante con el negocio, estaban investigados por evasión.
El 2019 fue un verano complicado para la ciudad de Mar del Plata, en la que el turismo bajó significativamente, y eso sumado al tarifazo en los servicios púiblico terminaron de liquidar a Sobremonte que terminó cerrando al público.
“Llegaban 160 mil de luz y 80 mil pesos de agua”, remarcaron los responsables del boliche Sobremonte al momento del cierre en enero de 2019.
Con gran oferta gastronómica y más de cinco pistas, Sobremonte supo convertirse en un clásico de la noche marplatense y paseo obligado para todos los turistas y también la farándula argentina.
Figuras de la talla de Diego Armando Maradona, Charly García, Andrés Calamaro, Miguel Abuelo, Gustavo Cerati, Luis Alberto Spinetta y muchos más pasaron varias noches en los años de esplendor de Sobremonte.
El último show en Sobremonte fue del grupo Damas Gratis, hace tres años. Luego cerró con promesas de volver pero en enero de 2020 uno de los dueños dijo que había cerrado definitivamente y que lo iban a demoler.
Un año después, el final de una parte de la historia de la noche y la cultura de Mar del Plata se materializa en la demolición del edificio de Sobremonte.
