Un joven de 21 años fue detenido ayer por la noche acusado de haber participado del crimen de Zoe Nerea Cortez, la joven de 18 que recibió un balazo en la cabeza disparado desde un auto en Monte Grande.
El arresto se llevó a cabo anoche en un allanamiento realizado en una vivienda de Esteban Echeverría en donde se secuestró un arma que será sometida a pericias, para determinar si fue la utilizada para el asesinato.
Los investigadores creen que el apresado es quien abandonó en el cruce de las calles Los Tulipanes y Alfonso Amat el Renault Symbol, patente LSW310, y robado un día antes en Adrogué, desde el que le dispararon a la joven.
Durante el procedimiento también fue demorado un menor de edad, aunque el fiscal de Esteban Echeverría a cargo de la causa, Andrés Devoto, sólo dejó aprehendido al mayor.
El artero ataque contra Zoe fue filmado por distintas cámaras de seguridad de la zona y los investigadores tratan de establecer si la joven era el blanco, si el disparo era para alguno de sus acompañantes o si al asesino se le escapó un tiro.
Esta mañana, el padre de la víctima, Juan Cortez, contó en la puerta de la funeraria donde se lleva a cabo el velatorio, que desde la fiscalía manejan una hipótesis que sería la más firme.
Lo que mencionó como posibilidad más fuerte, aunque sin dar detalles, es que el balazo estaba dirigido a su otra hija y que estaría relacionado con una denuncia que ella realizó tiempo atrás.
El hecho ocurrió alrededor de las 22.50 del lunes cuando las dos hermanas, acompañadas por un amigo, salieron de un gimnasio rumbo a su casa, ubicada en Olavarría al 700, a unas siete cuadras de donde se registró el crimen.
Cuando los tres caminaban por la vereda de Colón al 2500, un automóvil Renault Symbol detuvo su marcha, se abrió la puerta trasera y, sin mediar palabra, una persona disparó un balazo que impactó en la cabeza de Cortez.