Los diferentes bloques peronistas tensionarán la última sesión ordinaria de la Cámara de Diputados de la provincia con el pedido de tratar sobre tablas un proyecto que rechaza el Golpe de Estado en Bolivia y las expresiones del presidente Mauricio Macri sobre el tema.
Así lo adelantó la legisladora provincial de Unidad Ciudadana, Susana González, en diálogo con Diputados Bonaerenses Radio. “Vamos a buscar que se trate sobre tablas para repudiar el Golpe y la actitud del Presidente y el canciller Faurie”, dijo la ensenadense.
Párrafo seguido, González también disparó contra el sector amarillo y lo diferenció de la actitud de sus pares de la Unión Cívica Radical. “La parte PRO va a seguir usando eufemismos para no decir las cosas como son pero reconocemos que la UCR tiene una postura más clara”, amplió.
Así, la intención de los bloques peronistas de la provincia será exponer la postura política de los diputados de Cambiemos y trabajar sobre las internas que ocasionó el tema. “Queremos meterle picante para incomodarlos”, admitió una fuente legislativa esta semana.
Incluso, según pudo saber Diputados Bonaerenses, la idea originaria del bloque de Unidad Ciudadana era presionar con el pedido de una sesión especial sobre el Golpe en Bolivia, para el cual entre miércoles y jueves se recolectaban firmas por los pasillos. Finalmente esa movida no prosperó.
“La verdad es que ya no espero nada de este Gobierno. No se puede, por una cuestión orgánica, no repudiar este Golpe en Bolivia. Tenemos que ser contundentes ante el pedido de normalización de la democracia porque las imágenes de la represión son terribles”, enfatizó González.
Tal como adelantó este portal, además de los 293 proyectos que ingresaron en el orden del día y el rechazo la situación que atraviesa el país hermano, el objetivo central de la sesión será aprobar las extraordinarias donde tendrá lugar la primera batalla del gobernador electo Axel Kicillof.
Esto es la discusión sobre el Presupuesto 2020, la Ley Impositiva y el endeudamiento para la próxima gestión de gobierno, que deberá contar con el apoyo de las bancadas de la oposición para llegar a las mayorías especiales necesarias.
“Hay que poner las cosas en claro: a Cambiemos no le gusta debatir, si hubiesen podido evitarlo en estos cuatro años no se hubiesen presentado ni una vez en los recintos”, cuestionó González. En este sentido, esperan que esta postura quede evidenciada en los pasillos de la Cámara baja.
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