La acción de amparo colectivo de vecinos de Bahía Blanca afectados por el deficiente servicio de agua potable fue confirmada en segunda instancia, aunque sin la suspensión de las tarifas como había resuelto una jueza bahiense meses atrás.
La resolución fue dictada por la Cámara en lo Contencioso Administrativo de Mar del Plata, que articula con la localidad bonaerense de Bahía Blanca, tras la apelación que había presentado la empresa prestadora del servicio, ABSA.
Así, el Tribunal marplatense dispuso el resto de las medidas cautelares definidas por la jueza en lo Civil y Comercial N° 2 de Bahía Blanca, María Selva Fortunato, quien dio lugar a la presentación presentada por los vecinos ante el faltante de agua en el verano.
Según Fortunato, ABSA estaba obligada a garantizar el suministro de agua potable a través de un programa de contingencia, habilitar y difundir una línea de atención telefónica y de mensajería, con atención y control permanente.
Además, la empresa debería cumplir con el requerimiento dentro de las 4 horas siguientes a la recepción del pedido y habilitar e informar a la población de la ubicación de los surgentes disponibles y en operación para su uso.
Con la ratificación a medias de la Cámara marplatense, de los jueces Diego Fernando Ucín, Roberto Daniel Mora y Elio Horacio Riccitelli, se legitimó el reclamo de los vecinos, ya que Bahía Blanca está en emergencia en materia hídrica.
Sin embargo, el Tribunal en segunda instancia no confirmó la suspensión del cobro de tarifas que había dispuesto la jueza del Juzgado en lo Civil y Comercial Nº2, según el pedido de los vecinos bahienses.
Así, aunque los jueces consideraron que hay “problemas de carácter histórico” y que siguen vigentes en la red de agua local, entendieron que sería arriesgado exigirle a la empresa un plan de obras y al mismo tiempo quitarle parte de los recursos de la recaudación.
De esta forma, los 32 barrios bahienses que iban a ser compensados con descuentos en las facturas, ahora deberán pagar la tarifa completa de agua a pesar de los problemas de suministro que existan en adelante.
Cabe destacar que el amparo colectivo lo había formalizado la abogada Sandra Vulich, como asesora de un grupo de vecinos que reunió la representación de los usuarios del servicio de Bahía Blanca en general.
La cautelar fue presentada a principios de febrero pasado, y tuvo una resolución favorable para los vecinos a principios de marzo, aunque la aplicación de las medidas dispuestas por la Justicia fue objetada por los demandantes.
En esa línea, en la apelación, ABSA argumentó que la situación del suministro había mejorado respecto al verano, y que el servicio en Bahía Blanca hoy es prácticamente normal.
Asimismo, la empresa aseguró que la suspensión del cobro de tarifas podría causar “un colapso” en su ordenamiento financiero podría afectar a Bahía Blanca y a las otras 78 localidades donde presta servicios.
La compañía de agua sostenía que Bahía Blanca aporta el 13,56% de la recaudación total, con una suma mensual de unos $60,5 millones, lo que equivale a casi el 80% de lo que la empresa gasta para esa ciudad bonaerense.
A diferencia de ABSA, la Cámara marplatense opinó que la problemática "no ha perdido actualidad" y que si bien las falencias suelen intensificarse en verano, la crisis no debe entenderse como superada.
De todas maneras, los jueces rechazaron el punto de suspender las tarifas desde el 1 de enero, como había dispuesto la jueza Fortunato, porque “tal decisión podría comprometer incluso más la regularidad, continuidad y eficiencia de un servicio esencial que se encuentra en un estado crítico”.
Hace cinco días, la compañía anunció obras por $5.500 millones de pesos "para solucionar en forma definitiva el acceso al agua de los vecinos y vecinas del sur bonaerense".
