Tras la reunión con los funcionarios del gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, Gabriel Katopodis (Infraestructura) y Javier Alonso (Seguridad), quienes solicitaron el traspaso de la obra de la Autopista Presidente Perón, la administración de Javier Milei evalúa con buenos ojos ceder los contratos de las obra públicas que el Ejecutivo nacional no va a ocuparse, a las administraciones provinciales.
De esta manera, según fuentes de la Casa Rosada, el oficialismo estaría dispuesto a ceder la ejecución de dichas obras públicas a provincias y municipios, herramienta que se encuentra prevista en la nueva versión de la Ley Bases, que obtuvo dictamen de mayoría este jueves, luego de que el oficialismo cediera 45 modificaciones propuestas por la oposición dialoguista.
Es que, en el texto de la nueva Ley Bases, en el título III artículo 64 a 73, se establece que el Poder Ejecutivo, previa intervención de la Procuración del Tesoro y de la Sindicatura General de la Nación, por razones de emergencia, “podrá disponer la reconducción de los contratos de obras y servicio públicos que estén paralizados, a efectos de posibilitar el aporte de financiamiento privado“.
Es por ello que, varios gobernadores ven una oportunidad para, mediante fondos propios o haciendo jugar a sus bancos locales, dar un salto que les otorgue un fuerte rédito político, al hacerse cargo de las obras públicas paralizadas por el Ejecutivo nacional, que son de necesidad primordial para el territorio que comandan.
Tal es así que, en las últimas horas, un nuevo reclamo fue elevado al exministro de Interior, Guillermo Francos, por parte de la provincia de Buenos Aires. El mismo se suma al listado de distritos que reclaman hacerse cargo de las obras públicas con cierto grado de ejecución paralizadas por Nación.
Incluso, el miércoles, el propio Axel Kicillof recorrió dos obras paralizadas por Nación. Una de ellas es un Centro de Desarrollo Infantil, en General Lavalle, mientras que la segunda, es una serie de 30 viviendas ubicadas en el municipio bonaerense de Tordillo que, pese a estar avanzadas en un 70%, fueron frenadas por la administración libertaria.
En la misma sintonía, los gobernadores de Neuquén, Rolando Figueroa, y de Río Negro, Alberto Weretilneck, propondrán al Gobierno de Javier Milei que les transfieran las rutas nacionales a cambio del cobro de peajes debido al “estado de abandono”, en el que se encuentran.
Algo similar propuso, en las últimas semanas, el mandatario chubutense del PRO, Ignacio “Nacho” Torres, quien ya lo había gestionado con la Ruta Nacional n° 3, con el mantenimiento de la Ruta Nacional n° 40. Sin embargo, la lista de reclamos continúa a lo largo y ancho del país.
En ese contexto, y “de cara a un próximo año electoral”, desde el oficialismo prevén que sean cada vez más los gobernadores e intendentes que soliciten el traspaso de las obras públicas paralizadas, y que entienden que sería beneficioso para ambas partes, ya que al Ejecutivo nacional le permitiría mantener el “ahorro” fiscal, y a los funcionarios tener gestión “para chapear”.
