Ya son varias las denuncias que se fueron acumulando en lo que va del año respecto al abandono por parte del Instituto de Obra Médico Asistencial (IOMA) hacia sus afiliados, evitando otorgar los medicamentos correspondientes.
En este caso, Marcela Picarone es docente y afiliada a la mutual, padece de cáncer de vejiga y desde hace algunos días que espera que IOMA compre la droga Pembrolizumab, luego de confirmar la aprobación del medicamento.
Bajo este marco, el marido Gastón explicó que “hoy nos dijeron que estaba aprobada, pero hasta que no me llamen para que vaya a comprarlo, no me hago ilusiones”.
Sucede que, Picarone viene realizando la quimioterapia sin que la obra social le ponga impedimentos para otorgarle los remedios anteriores y le colocaron dos catéteres que deben cambiarse cada dos meses.
“Ambos catéteres tuvieron un costo de alrededor de $6 mil pero eso fue hace dos meses atrás, cuando después de seis meses logramos que se los cambien porque IOMA no los proporcionaba”, apuntó en diálogo con Diputados Bonaerenses.
En consecuencia, el esposo de Picarone se mostró preocupado ante esta situación y explicó que “si tardaron seis meses para cambiar los catéteres, hasta que no me llamen del laboratorio para comprar el Pembrolizumab no voy a estar tranquilo”.
Una vez que se aprueba la medicación, al ser un medicamento de compra directa, la obra social debe comprar la droga al laboratorio, para luego trasladarlo a una farmacia. Recién ahí le informan al paciente dónde debe retirarlo.
“Esta semana pedimos una cautelar de amparo, a través de la Defensoría del Pueblo para intimar a la mutual y que en 47 días cumpla con los plazos establecidos”, finalizó Gastón.
