El Ministerio de Salud de la Nación informó anoche sobre ocho casos sospechososde hepatitis en niños de origen desconocido en el país, que actualmente se encuentran en estudio e investigación epidemiológica.
Bajo el título “Información relevante del Ministerio de Salud de la Nación ante casos sospechosos de hepatitis aguda grave de origen desconocido en población pediátrica”, la cartera sanitaria nacional comunicó los ocho casos sospechosos que padecen la enfermedad.
“Puede que estos sean los mismos que habitualmente suceden”, comentó el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, Nicolás Kreplak, respecto a los casos de hepatitis en niños. A su vez, el titular de la cartera sanitaria bonaerense sostuvo que los pacientes “quizá se deban a un tipo de virus nuevo” por lo que, desde las autoridades “se está trabajando sobre un posible virus causal”.
En este contexto, el pasado 27 de abril, el Ministerio de Salud de la Nación emitió la alerta epidemiológica, tras copiar la precaución implementada por la Organización Mundial de la Salud (OMS). Kreplak dijo que esta medida “se da porque en Europa hubo una serie de casos de un tipo de hepatitis”.
Asimismo, la cartera sanitaria nacional recomendó a la población “controlar y completar los esquemas del Calendario Nacional de Vacunación para cada edad, realizar higiene frecuente de manos, evitar el contacto con personas enfermas, cubrirse al toser o estornudar y evitar tocarse ojos, nariz y boca”.
Además, el ministerio que conduce Carla Vizzotti, pidió que consulten a un médico ante la presencia en menores de 16 años de síntomas compatibles con los de la hepatitis, tales como fiebre, vómitos, orina oscura, heces blancas, entre otros.
Vale recordar que, la alerta epidemiológica del Ministerio de Salud se activó luego de que un niño de 8 años, de la localidad santafesina de Rosario, sea el primer caso diagnosticado con hepatitis grave de origen aún desconocido en el país.
“Está en proceso de investigación y estudio”, puntualizó la ministra de Salud de Santa Fe, Sonia Martorano, respecto al caso del niño de 8 años. Asimismo, la titular de la cartera sanitaria provincial explicó que en los análisis “se han descartado las hepatitis A, B y C pero estamos esperando los resultados de D, E y otras causales que siempre estudiamos”.
A partir de la alerta epidemiológica, el Ministerio de Salud de la Nación anoche creó un grupo de trabajo integrado por distintas áreas de esa cartera, como la Dirección de Epidemiología, la Dirección de Salud Perinatal y Niñez, la Dirección de Control de Enfermedades Inmunoprevenibles, el Programa de Control de Hepatitis Virales, entre otros espacios dedicados a la salud.
El objetivo de este nuevo equipo de trabajo, conformado anoche, es fortalecer la vigilancia de la hepatitis en niños, para poder estudiar en profundidad cada caso que se presente en todo el territorio nacional.
Hepatitis en niños: qué dijo Kreplak
El ministro de Salud bonaerense se refirió esta mañana a los ocho casos en estudio de hepatitis en niños en la Argentina, luego de que la OMS y el Gobierno nacional anunciaran una alerta epidemiológica.
Kreplak, a fin de brindar tranquilidad a la población, remarcó que en nuestro país la hepatitis en niños “no es brote” y que los afectados hasta el momento son personas que no tienen relación entre sí.
Por lo tanto, según el funcionario bonaerense, en la actualidad, los pacientes que padecen este virus no deben ser “una preocupación”, a no ser que en algún momento se vea que “en una escuela se den varios casos juntos”.
“No es para alertar, sino para que el equipo de salud esté atento”, apuntó el ministro de Salud de la provincia de Buenos Aires, luego de que la cartera sanitaria nacional emitiera la alerta epidemiológica tras los casos de hepatitis en niños.
Qué es la hepatitis
La hepatitis, según el Ministerio de Salud de la Nación, consiste en la inflamación del hígado que puede ser de causa infecciosa, tóxica o autoinmune. En la mayoría de los casos, esta enfermedad es provocada por un virus.
Las hepatitis virales son causadas más frecuentemente por los patógenos A, B y C que se manifiestan en el cuerpo humano mediante fiebre, fatiga, pérdida del apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal, orina oscura, heces blancas, dolor articular e ictericia.
Los test para las hepatitis B y C, actualmente, permiten iniciar un tratamiento oportuno y minimizar la transmisión del virus que causa la enfermedad. En cambio, las hepatitis A y B son prevenibles a través de vacunas.
A día de hoy, los tratamientos que existen en los centros de salud para la hepatitis B crónica y la hepatitis C, son seguros y altamente efectivos en nuestro país que, actualmente, tiene pocos casos de este virus en niños.