El cadáver de una mujer de 89 años, que falleció en marzo de este año, fue encontrado en una vivienda de la localidad bonaerense de Caseros, en el partido de Tres de Febrero, en completo estado de descomposición.
La anciana, que estaba al cuidado de su nieto Agustín, de 24 años, habría fallecido por coronavirus pero el joven no avisó nunca a la familia, abandonó el cuerpo de la abuela y se escapó.
Todo comenzó cuando la familia de María Jevos, alertada porque ninguno de los dos atendía el teléfono, decidió acudir al domicilio de la mujer, situado en la calle Larrea en Caseros, con la Policía.
Al llegar, encontraron en la puerta de una de las habitaciones un cartel que decía: “No entrar, llamar al 911, leéme” junto a una carta donde el joven relataba en detalle lo que había sucedido con la mujer.
Al abrir la puerta del dormitorio, la familia se topó con el cuerpo de Jevos tapado con una frazada el cual, pese al estado avanzado de descomposición, pudo ser reconocido por su hija.
En el escrito, el nieto de la anciana contó que su abuela falleció en el mes de marzo, pero por miedo la acostó en la cama y no avisó a nadie. Desde hacía meses les pedía que por la pandemia no vayan a visitarla por temor al contagio, pero desde el domingo 29 de agosto habían perdido todo contacto con él.
Además, el joven aclaró que la suciedad y el descuido del hogar fueron luego de que Jevos falleció, pero aseguró que mientras vivió siempre estuvo todo en orden y pidió disculpas a la familia con la esperanza de que puedan perdonarlo por lo acontecido.
La muerte es investigada por la UFI Nº 05 de San Martín quien deberá investigar lo sucedido con la abuela y determinar si al nieto le corresponde algún tipo de responsabilidad.
