El presidente de Inquilinos Agrupados, Gervasio Muñoz, adelantó que realizarán este jueves presentaciones judiciales simultáneas en diferentes provincias para pedir la nulidad de la derogación de la Ley de Alquileres que está incluida en el decreto de necesidad y urgencia (DNU) 70/2023 dictado por el presidente de la Nación, Javier Milei.
“Hay un drama generalizado, que es que la gente no sabe dónde vivir“, aseveró Muñoz al anticipar esta serie de planteos de nulidad que realizará Inquilinos Agrupados este jueves.
En este sentido, el presidente de Inquilinos Agrupados explicó que irán “no por la inconstitucionalidad del DNU” sino en un pedido de nulidad. “Mañana hacemos la presentación en la Justicia, no por la inconstitucionalidad del DNU sino en diferentes provincias“, remarcó.
“Para no caer en el fuero de la Ciudad, que es obviamente macrista, vamos a presentar en diferentes provincias el pedido de nulidad de lo que tiene que ver con el sector afectado, que es el de los inquilinos en nuestro caso“, anticipó Muñoz.
Además, en declaraciones radiales, el presidente de la entidad señaló que lo que establece el DNU “no es sólo una derogación de la Ley de Alquileres” sino que, “además, el Gobierno está redactando un nuevo Código Civil que básicamente lo que establece es que no haya reglas de juego para alquilar vivienda en la Argentina“.
“Sería el único país del mundo en el que un contrato de alquiler para vivienda permanente podría ser de un día, una semana, un mes y se podría pagar en cualquier moneda que te exijan“, detalló Muñoz.
Ante ese contexto, el titular de Inquilinos Agrupados relató que “es muy difícil de imaginar la magnitud de las consecuencias que podría tener una medida de este tipo”, en relación a la derogación de la Ley de Alquileres.
“Lo que sí sabemos es lo que empieza a suceder, hay aumentos de 500 o 600% para los contratos que se renuevan y ya hoy la consulta permanente de inquilinos e inquilinas en todo el país es que no saben dónde van a ir a vivir en unos días y que están desesperados“, contó Muñoz.
Por último, Muñoz indicó que “hoy hay un drama generalizado, que es que la gente no sabe dónde vivir, ayer la tapa de un diario decía ‘volver vencidos a la casa de nuestros padres’, y recibí muchísimos mensajes planteando que no tienen casa a donde volver”.
Es preciso señalar que, el DNU sostiene que “los inconvenientes y penurias que el exceso de regulación normativa han aparejado en las convenciones privadas, especialmente en los contratos de locación de viviendas, es un hecho público y notorio, con graves consecuencias tanto para locadores como para locatarios y la virtual destrucción del mercado inmobiliario”.
“En forma concordante, deviene imprescindible la derogación de la nefasta Ley de Alquileres N° 27.551“, establece el DNU y explica: “Los alquileres podrán establecerse en moneda de curso legal o en moneda extranjera, al libre arbitrio de las partes, el locatario no podrá exigir que se le acepte el pago en una moneda diferente a la establecida en el contrato”.
Además, el DNU remarca que “las partes podrán pactar el ajuste del valor de los alquileres, será válido el uso de cualquier índice pactado por las partes, público o privado, expresado en la misma moneda en la que se pactaron los alquileres”.
Vale recordar que, el DNU, en uno de sus 300 artículos, deroga la Ley de Alquileres, que entró en vigencia en julio de 2020, así como también la reforma implementada en 2023. La misma establecía una duración de tres años para los contratos de locación, fija condiciones de actualización, cada seis meses en la actualidad, y la obligatoriedad de registrar en pesos los contratos en la AFIP.
Sin embargo, tras arduas negociaciones y tracciones en el Congreso de la Nación, en octubre de este año, la Ley de Alquileres se modificó y se redujo a 6 meses el plazo de actualización de los valores, al tiempo que se cambió el ICL por la fórmula Casa Propia, que se utiliza para los créditos Procrear, y que se calcula con el Coeficiente de Variación Salarial (CVS).




