El proyecto de ley del Frente de Todos que tiene en alerta a los kiosqueros bonaerenses escaló un nuevo peldaño en el camino a convertirse en ley, luego de que esta semana fuera aprobado en comisión de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires pese al rechazo de Juntos por el Cambio.
Es que, la iniciativa presentada por el saliente diputado bonaerense del Frente de Todos, Facundo Tignanelli y el presidente de la Cámara baja provincial, Federico Otermin, que prohíbe la venta de cigarrillos en cercanías a los colegios tuvo dictamen de mayoría en la comisión de Salud Pública y continuará en carrera rumbo al recinto.
En este sentido, desde Juntos por el Cambio mostraron el rechazo a la propuesta que busca endurecer las regulaciones en torno a la venta y consumo de cigarrillos en la provincia, ya que consideran que es necesario reformular ciertos puntos del documento antes de ser tratado en una sesión.
“Nuestro bloque no votó a favor del proyecto tal cual estaba porque consideramos que estos no son temas para sacar rápidamente, que debe haber un trabajo más profundo”, explicó a Diputados Bonaerenses la diputada de Juntos por el Cambio, Johanna Panebianco.
En rigor, la legisladora por la Quinta sección electoral sostuvo que “la venta de cigarrillos a 100 metros de los colegios nos parece redundante porque la ley nacional prohíbe la venta a menores de 18 años”.
Vale recordar, que dentro de los puntos que plantea el proyecto que generó la preocupación de los kiosqueros es que prohíbe la venta de productos de tabaco en comercios ubicados a menos de 100 metros de las escuelas.
Este ítem que el Frente de Todos incluyó en el documento generó polémica en el sector de los kiosqueros bonaerenses, que de sancionarse el proyecto, verían vulnerado parte de sus ingresos a la vez que implicaría una inversión de dinero modificar los mostradores de los comercios.
Además, uno de los artículos se superpone con la Ley nacional de control de tabaco Nº 26.687 y la Ley bonaerense 13.894 que regulan la venta, promoción y distribución de cigarrillos y sus derivados, que prohíbe la venta de estos productos a menores de 18 años.
A pesar que no existe una postura unánime dentro del bloque de Juntos por el Cambio en torno al proyecto que pone en jaque a los kiosqueros bonaerenses, Panebianco indicó que “en términos generales estamos de acuerdo con que se regulen estas cuestiones porque la ley de tabaco es anterior a los vapeadores y a otras formas de consumir tabaco”.
No obstante, la diputada calificó al proyecto como “una sobrelegislación” a la vez que precisó que “no hay necesidad ni capacidad de implementar y controlar” la normativa en el caso que se apruebe, debido a que “si la ley nacional no se cumple es difícil que esta se cumpla”.
“Estoy de acuerdo en lo macro con la regulación pero creo que debe ser trabajado con mucha seriedad, tiempo y conciencia”, dijo Panebianco a la vez que sentenció: “O nos concentramos en que se aplique lo que ya existe o buscamos caminos que sean factibles”.
En la misma línea, se pronunció la diputada de Juntos por el Cambio, Eugenia Brizzi, en diálogo con este medio. “Hubiese sido bueno que el proyecto no baje directamente desde el Ejecutivo”, analizó la legisladora de la Primera sección electoral.
“La idea es trabajar los proyectos, nosotros pedimos seguir trabajándolo porque no está en condiciones de aprobarse sin algunas modificaciones”, propinó la diputada cambiemita a Diputados Bonaerenses.
Si bien la semana que viene finaliza el período ordinario de sesiones en la Legislatura bonaerense, los avances del Frente de Todos con el proyecto que despierta preocupación de los kiosqueros abren el escenario para su tratamiento sobretablas en una posible sesión extraordinaria antes de fin de año.
kiosqueros bonaerenses advierten por posibles cierres
La Unión de Kiosqueros de la República Argentina (UKRA) aseguró que si la ley se aprueba se verían perjudicados los 26.000 comercios bonaerenses del rubro a la vez que se verán obligados a afrontar “gastos de reformas, caída en ingresos y eventuales cierres”.
En este sentido, el titular de UKRA, Adrián Palacios, sostuvo que con el “cierre de persianas miles de familias dueñas de kioscos y sus empleados quedarán en la calle”, si el proyecto llega a convertirse en ley y estimó que en podrían perderse alrededor de “80 mil puestos de trabajo”.
Además, los kiosqueros afirmaron que la prohibición de venta de tabaco a menores de 18 años, otro de los puntos que se incluye en el proyecto, se cumple a rajatabla porque “se trata de respetar una ética comercial al cuidar la salud de niños y adolescentes”.
Por otra parte, la Unión de Kiosqueros expresó que “de convertirse en Ley se fomentará el mercado negro y los canales no habilitados para la comercialización de cigarrillos, cigarros y otros productos que contengan tabaco, mientras que el rubro legal verá complicarse su grave situación económica derivada de la pandemia”.
Desde la UKRA reclamaron que “la entidad y las cámaras del sector tabacalero no fueron invitadas a presentar su opinión y tampoco fueron consultadas sobre el tema”, a pesar de que “se presentó una nota a la presidencia de la Cámara de Diputados, a cargo de Federico Otermín”.
