Otra vez el histórico restaurante La Tratorría de La Plata dio la nota, luego de haber sido sancionado hace menos de 10 días. En este caso, volvió a atender a clientes en el interior del local de diagonal 74 y 10, actividad que no está habilitada por el riesgo de contagios de coronavirus.
En el operativo llevado adelante el lunes por la noche uno de los encargados del restaurante fue más allá: no sólo intentó disimular la presencia de los clientes alegando que eran “empleados” sino que cuando fue descubierto intentó resistir la clausura actuando de manera violenta contra los inspectores.
“El hombre le quiso pegar a un inspector, fue una situación realmente grave”, explicaron desde la Secretaría de Convivencia y Control Ciudadano, a cargo de Virginia Pérez Cattáneo, y agregaron: “Hace diez días ya se había procedido a una clausura por el mismo motivo”.
En el local platense había por lo menos tres mesas en funcionamiento en su interior, cuando en la capital provincial sólo está permitida por decisión del intendente Julio Garro la modalidad “take away plus”, que habilita a los comercios gastronómicos a ofrecer servicio de mesa en la vereda.
En ese sentido, desde el Municipio explicaron que en las dos oportunidades "previo a la clausura los comercios ya habían sido notificados en reiteradas oportunidades de esta misma situación y decidieron incumplir con lo autorizado” poniendo en riesgo de contagio a los clientes.
“Al momento de la inspección se verificó en pleno funcionamiento con comensales comiendo en su interior al menos tres mesas, el encargado que atendió primero negó los hechos y luego los reconoció, pero fue muy agresivo, se sacó el barbijo para insultar y quiso agredir por lo que se llamó a personal policial”, detallaron.