En medio de las críticas y repercusiones por el asesinato del kiosquero de Ramos Mejia, Roberto Sabo, el jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, dijo que es necesario un régimen especial para los jóvenes que cometen delitos: “Un chico puede votar a los 16 años, pero no es responsable. Ahí hay una contradicción, no puede ser que no sea punible”.
Con la inseguridad como eje de los últimos días de campaña, Larreta se sumó a la polémica generada a partir del asesinato del kiosquero de Ramos Mejia al solicitar un régimen judicial especial para menores, que de hecho ya existe en argentina desde 1980.
En la actualidad, según el Régimen Penal de Minoridad, cualquier joven de entre 16 y 18 años que comete delitos con penas mayores a dos años es punible y puede ir a la cárcel cuando cumple la mayoría de edad.
En su planteo, Larreta expresó que “lo más importante es el cambio en el Código de Procedimiento Penal, que permite las excarcelaciones, que hacen eternos los juicios”. Además, el jefe de Gobierno porteño refiriéndose al asesinato del kiosquero de Ramos Mejia dijo que “no puede ser que no sea punible” un chico de 16 años que comete un crimen.
“Con menores para mí no es bajar la edad, sino que haya un régimen penal juvenil especial. Tiene que ver con la educación pero con que haya instituciones, con los temas sociales, con que hay menores que matan gente”, insistió Larreta en las declaraciones de esta mañana.
En consonancia, el ministro de Seguridad de la Nación, Aníbal Fernández se refirió al debate sobre el punitivismo que reinstaló Larreta. “Es discutir sobre la edad y todo ese tipo de situaciones y la realidad es que los casos que uno tiene de menores son prácticamente nulos”, sostuvo el funcionario.
Según un informe realizado por la Secretaría de Niñez y Adolescencia de la Nación y Unicef en 2015 en la Argentina hay casi 7.200 menores en conflicto con la ley, de los cuales el 18% estaban presos en alcaidías, centros cerrados y comisarías. El resto de los menores se encontraban, bajo programas de supervisión estatal.
Además, el informe de Unicef da cuenta de que el mayor porcentaje de menores con problemas con la ley corresponde a los 17 años, los que representan casi un 43% de la muestra en el total del país. Por su parte, el 20,1% tiene 18 años al momento de la encuesta, y en el otro extremo hay un 3,8% con menos de 16 años.
