Tras la sanción de la Ley Bases, Javier Milei insistirá con las reformas política y laboral, que quedaron afuera.
Tras un agónico proceso parlamentario que culminó, luego de casi siete meses, con la sanción de sus primeras leyes, la administración libertaria, a cargo de Javier Milei, buscará insistir con las reformas políticas y laborales, que quedaron pendientes en la Ley Bases y el Paquete Fiscal.
Es que, tras la sanción, el jefe de Estado libertario aseguró que la aprobación de la normativa marcó “un punto de inflexión para la gestión de La Libertad Avanza”, y anunció una nueva fase en la administración.
En ese marco, el Gobierno buscará insistir con las reformas política y laborales, quitadas en la Ley Bases tras la rueda de negociaciones con la oposición dialoguistas, con la mira puesta en las elecciones legislativas del 2025.
En detalle, una de las prioridades del Ejecutivo es avanzar con modificaciones en el sistema electoral, que incluyen la eliminación de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) y el establecimiento de la Boleta Única de Papel, que tiene media sanción de Diputados.
Al respecto de las PASO, Milei en varias oportunidades manifestó su intención de eliminarlas al argumentar que representan “un gasto innecesario”, al requerir un presupuesto considerable en logística, seguridad y personal.
Además, desde el plano político, las elecciones primarias han significado un desgaste tanto del electoral como de los candidatos. La necesidad de movilizar a los votantes en múltiples ocasiones puede llevar a una fatiga electoral e impactar negativamente en el proceso electoral.
Por otra parte, Casa Rosada apunta a modificar la Ley de Financiamiento de los Partidos Políticos (26.215), que establece el límite de los aportes privados de campaña por agrupación y por personas.
El oficialismo proponen eliminar el artículo 45 de la ley 26.215, que determina que no puedan superar “la suma resultante al multiplicar el número de electores habilitados, por un módulo electoral, de acuerdo al valor establecido en la Ley de Presupuesto General de la Administración Nacional”.
Entre las reformas políticas, el Pesidente busca también derogar el Registro de Empresas de Encuestas y Sondeos de Opinión de la Cámara Nacional Electoral e impulsar una cuenta corriente única de los partidos políticos.
También, los libertarios buscan la reestructuración del sistema de representación electoral actual por uno de circunscripciones uninominales. En Balcarce 50 reconocen que es la propuesta con menos adhesiones de la oposición aliada y sostienen que podrían postergarla.
El oficialismo propone dividir las provincias en jurisdicciones electorales, de forma que cada una elija a un representante único para el Congreso de la Nación, además del intendente y del gobernador. Esto modificaría el número de diputados nacionales a elegir a uno por cada 180.000 habitantes.
Por otra parte, la mesa chica del Ejecutivo quiere avanzar con una reforma laboral ampliada con los puntos del decreto de necesidad y urgencia (DNU) 70/2023 que quedaron afuera de la Ley Bases, que fue sancionada esta semana.
En detalle, se trata de la optatividad del pago de la cuota solidaria de los sindicatos, la obligatoriedad de que los sindicatos elijan a sus autoridades a través de elecciones periódicas y supervisadas por la Justicia Electoral y la aplicación de los convenios específicos sobre los colectivos.
Por último, La Libertad Avanza quieren impulsar la limitación al derecho a huelga mediante la declaración del servicio esencial del 50% de las áreas de salud, transporte, telecomunicaciones y educación.