Horas después de que se confirmaran los 1.450 despidos de la constructora Techint, la ministra de Gobierno de la Provincia María Teresa García salió advertir que “no es momento para que sectores concentrados den cuenta del enorme poder que han tenido sobre el Estado para doblarle la mano”.
Sucede que, el grupo empresarial acordó las desvinculaciones en el Ministerio de Trabajo luego de comprometerse a abonar la indemnización, los salarios pendientes hasta hoy y una bonificación adicional de $33 mil por cada trabajador.
En este sentido, García consideró que “han sido protagonistas privilegiados en el Gobierno de Macri, tanto que se creyeron dueños del Estado. Pero llegó la crisis del coronavirus y ahora sienten amenazada esta voracidad que tienen de no parar de ganar”.
“Están como buitres y aves de rapiña sobrevolando esta crisis social para intentar no perder y para ver qué otra tajada pueden sacar”, remarcó la Minsitra en sintonía con la reacción del presidente Alberto Fernández, apenas conocida la decisión de la empresa.
“Has ganado tanta plata en tu vida, tenés una fortuna que te pone entre los más millonarios del mundo; hermano, esta vez colaborá, y hacelo con los que hicieron grande a tu empresa, con los trabajadores”, había afirmado el jefe de Estado.
Paso seguido, el primer mandatario dictó un Decreto de Necesidad y Urgencia en el que se prohibieron por un período de 60 días “los despidos sin justa causa y por las causales de falta o disminución de trabajo y fuerza mayor”.
Sin embargo, para la funcionaria “el caso de Techint es un claro acto de provocación hacia el Estado”. “En una situación como la que atravesamos, si yo fuera ellos trataría de no provocar porque hay una revalorización de todo lo que está haciendo el Gobierno y esto va a merecer la sanción de la sociedad”, sentenció.
En rigor, desde el Ejecutivo entienden que de ningún modo Techint tenía la necesidad de despedir y que si la tuviese, hay instrumentos disponibles para sostener la plantilla. Por eso, esta medida es leída como una suerte de presión para que se reanude la actividad económica.
