Los presidentes de las dos bancadas más fuertes de la Cámara de Diputados bonaerense, Facundo Tignaneli del Frente de Todos y Maximiliano Abad de Juntos por el Cambio, le pusieron, literalmente, el broche a la sesión donde se estrenó por primera vez en la historia de la Legislatura el trabajo remoto.
La sesión que comenzó con muestras de acuerdo con la declaración de la emergencia de género, el aval a una docena de decretos de Axel Kicillof y la media sanción al proyecto que suspende las ejecuciones, dejó el plato fuerte político para el final. Fueron los dos últimos oradores de la noche.
El picante contrapunto entre el camporista y el radical fue cara a cara. Los dos estaban en el recinto, a unos metros de distancia, y a través de sus pantallas los seguían cerca de 70 diputados. El que salió a marcar la cancha fue Abad y Tignanelli minutos después no le dejó pasar ni una.
“Lo único que no nos puede pasar es poner en cuarentena a los tres poderes del estado con los cuales funciona la República. Le dijimos al Gobernador que íbamos a trabajar en unidad pero eso no es unanimidad. Cuando queremos defender nuestras ideas tiene que haber ámbitos para poder hacerlo. Vamos a poner en cuarentena nuestros valores, vamos a levantar la voz”, arrancó envalentonado Abad.
Además de poner en agenda el tema presos y el jury iniciado al juez de Casación Penal bonaerense Víctor Violini, el diputados cambiemita apuntó a la crisis económica en las comunas. “Es indispensable aprobar el proyecto de comunicación que le pide al Ejecutivo que la base de datos de la Anses la puedan tener los intendentes, para que no se pisen con ayuda, en momentos donde la manta es corta, también que los recursos se distribuyan equitativamente y para desatarle la mano a los intendentes, posibilidad redistribución del FIM”, señaló Abad.
El siguiente y último orador fue Tignanelli que había punteado las respuestas minutos antes. “Recién escuchaba al diputado preopinante preocupado por la cantidad de sesiones, creo Presidente que llevamos más sesiones que el año pasado cuando no había una pandemia, no escuché en ese momento a ningún diputado preguntar porque no se sesionaba”, retrucó.
Renglón seguido el matancero encadenó otra réplica. “El Gobernador desde el día 1 de la pandemia puso a disposición su equipo para asistir a los intendentes, en cambio nunca en los últimos cuatro años la ex gobernadora recibió a los bloques políticos y el Gobernador sí lo hizo”, dijo Tignanelli.
Y siguió: “Celebro otra vez que el diputado preopinante diga que nuevamente que es lo que viene a representar, recién decía que la Anses le pase la base de datos a los intendentes para que no se pise la ayuda, nos tocó ver como el dueño de Vicentín se fugaba la plata del Estado y no había preocupación. La preocupación siempre viene que haya un error de inclusión para quienes los más lo necesitan”. Sobre el tema presos también le respondió con la “Mesa Judicial”.
Cuando habían pasado más de dos horas de la sesión y en el último proyecto en el que se respaldó el proceso de restructuración de la deuda que lleva adelante Kicillof con plazo hasta el 24 de mayo, los presidentes de bloque se animaron al último cruce.
El secretario legislativo de la Cámara y ex legislador Mauricio Barrientos leyó la versión final del proyecto que habían acordado en labor.
“Si ese es el texto nosotros no acompañamos, no es el que acordamos”, interrumpió Abad.
"Tiene el texto”, preguntó enseguida el titular del Cuerpo Federico Otermín mientras había confusión sobre el reclamo puntual. “Pido por favor que lea el texto completo”, añadió Abad.
Enseguida Tignanelli intervino. “Cuando termine el texto acordado puede el secretario legislativo informar las palabras que se modificaron”, pidió el camporista.
Para cerrar, el secretario legislativo leyó la versión consensuada y agregó: “Se suprime la palabra estrategia y real de pago”. A esa altura no había palabras que cierren la grieta y afuera estaba la pandemia.
