Mauricio Macri arribó este viernes por la mañana a París en el vuelo de Air France AF 229, junto a su esposa Juliana Awada y su hija Antonia y una asistente, donde realizarán 14 días de aislamiento, para luego dirigirse a Zurich.
En Suiza se prevé que se instalará para afrontar tareas como presidente de la FIFA, lo que le sirvió al jefe de Juntos por el Cambio como coartada para volver a salir de Argentina con agenda incierta.
?A los abrazos: repudian el viaje de #MauricioMacri que generó escándalo en #Paraguay
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— Diputados Bonaerenses (@dipbonaerenses) July 15, 2020
Hace dos semanas Macri había generado polémica cuando se trasladó a Asunción, el 13 de julio pasado, y se encontró con el ex jefe de Estado Horacio Cartés y el actual mandatario paraguayo, Mario Abdo Benítez.
Como en el país limítrofe, en su llegada al viejo continente despertó una catarate de críticas al afirmar que estaba “recién llegado a una sociedad donde se vive en libertad y con responsabilidad”.
La referencia fue en línea con sus críticas a la cuarentena obligatoria dispuestas por el presidente Alberto Fernández para mitigar los contagios de coronavirus y evitar el colapso del sistema sanitario.
Macri partió del país luego de quedar envuelto en una batería de causas por corrupción y espionaje ilegal, de ahí con que se especule que sería este el verdadero motivo de su viaje.
El expresidente eligió para hospedarse la Réserve Hotel & Spa, que se define como un "Hotel de lujo" en su página web, cuenta con 25 suites, 15 habitaciones y una suite en una casa privada.
El ostentoso hospedaje además dispone de un restaurante bar catalogado como "de dos estrellas", un Spa con piscina cubierta de 16 metros y un gimnasio con un entrenador deportivo.
