martes, abril 23, 2024

Diputados debaten sobre la violencia institucional contra el colectivo travesti-trans

Fue una convocatoria de la comisión de Género y Diversidad que contó con la presencia de militantes, concejales y referentes de la educación.

En el marco de las reuniones de comisiones abiertas de la Cámara de Diputados, desde la de Género y Diversidad desarrollaron una emocionante jornada para abordar la despatologización trans y poder hablar de identidades libres de diagnóstico.

En la presentación virtual participaron militantes LGTBQ+, legisladores, concejales y referentes de la educación de toda la provincia, convocados por el diputado y presidente de la Comisión, Alexis Guerrera y la vicepresidenta, la diputada Marisol Merquel.

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“Para tener logros en la construcción de la Provincia, es necesario escucharnos, interactuar. Estamos dispuestos a una articulación para lograr más derechos. Sabemos del esfuerzo de ustedes y que a pesar de contar con una ley, la discriminación se sigue sintiendo y es algo que ya no podemos permitir en nuestra sociedad. Esa es parte de nuestra tarea de construcción colectiva”, expresó la legisladora Merquel.

La idea de la jornada fue concientizar y poner sobre la mesa los diversos problemas que enfrentan las personas con identidades travesti y transgénero, expuestas a las diferentes modalidades de la violencia institucional, en particular dentro del sistema de salud, que durante años (y aún hoy) desarrollaron prácticas discriminatorias contra el coletivo.

Durante muchos años tuvieron que soportar que la medicina hablara por ellos, no poder contar sus propias vivencias, no podían ser como lo sentían porque la medicina y la sociedad les decía, y en gran medida todavía les dice, cómo deberían ser. Nuestra tarea es abrir las puertas de la Legislatura, abrir la cabeza de las y los vecinos e intentar abrir los corazones de las y los bonaerenses para empezar a entender que cada uno es lo que siente”, manifestó el diputado Guerrera.

En ese orden, el legislador massista y ex intendente de General Pinto durante más de una década, destacó que se trata de una cuestión cultural que debe cambiar para evitar el sufrimiento innecesario de cientos de personas solo por vivir su identidad y sexualidad como lo deseen.

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“No sé si un humilde diputado puede aportar, pero como sociedad debemos un perdón por todo lo que padecieron y padecen. Debemos un perdón más grande porque todavía hoy las y los seguimos invisibilizando. Si hay un solo argentino que padece una discriminación que podría regular el Estado, es porque estamos en falta. Pido perdón a ustedes por lo que todavía el Estado no hizo para subsanar tanto dolor”, expresó el legislador.

Cabe recordar que la comisión de Género y Diversidad fue una de las novedades en la Cámara baja para este año legislativo y que estrenó sus funciones en el nuevo periodo. Asimismo, la Legislatura avanza en temáticas de derechos sobre esta población, ya que Alma Fernández se convirtió en la primera en firmar un contrato de trabajo en el Senado provincial.

 

 

Uno de los pasajes más emocionantes de la jornada fue durante la exposición de Benjamín Génova, un joven varón trans que relató su experiencia de vida y cómo fue el camino que transitó para poder vivir su identidad de género como lo sentía.

“En esa oportunidad, recién sancionada la ley de identidad de género, las puertas de los hospitales se cerraban, encontraba respuestas negativas. Fue muy difícil, todo este estigma y discriminación fue tirado abajo por la ley, impacta de forma positiva en nuestras vidas”, marcó el joven.

Génova marcó que la patologización de los cuerpos trans fue un impedimento para acceder a derechos básicos como trabajo, vivienda, seguridad, salud y señaló que muchas personas sufren hasta la muerte por esta discriminación.

 

 

Cabe destacar, que las alarmantes cifras de muertes en la comunidad están vinculadas al “travesticidio social”, término que hace referencia a la falta de acceso a la salud y a otros derechos básicos que no están adaptados para gente trans y que generan poca concurrencia y abandono.

Una parte importante del problema de los homicidios de travestis es la prostitución, consecuencia de la marginación, que coloca en situación de vulnerabilidad a quienes la ejercen, de hecho la expectativa de vida de una travesti en la Argentina es de 40 años.

Luego, Ornella Infante, directora de políticas contra la discriminación del Inadi, tomó la palabra y aseguró que debe legislarse y trabajar para que todos los actores del sistema de salud, desde médicos hasta personal administrativo, cambien la cultura de discriminación contra las personas trans.

“Necesitamos prohibir esas terapias de aversión que vemos que no solo lo hacen los profesionales de la salud, sino las iglesias, que salen a empantanar la lucha de las personas que nos morimos a los 40 años. Hay que promocionar la ley de identidad de género y que se cumpla la atención gratuita a las personas trans”, aseguró la referente.

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