Choferes de taxis de la ciudad bonaerense de Mar del Plata denunciaron que sufren todos los días y sobre todo durante la noche diferentes robos violentos y argumentaron que no utilizan el cinturón de seguridad porque los delincuentes “lo usan para ahorcarnos”.
En ese sentido, cansados de ser víctimas de estas maniobras los representantes del gremio tuvieron un encuentro con las autoridades policiales donde resolvieron que la fuerza de seguridad se comprometería a reforzar los controles en la localidad balnearia.
“Hay compañeros que les han pegado tanto que no quieren subirse más a un remis o quieren pasarse a trabajar de día, el 20 de enero sufrimos la muerte de un compañero y nos llenaron de promesas, pero después quedaron en el olvido”, afirmaron los delegados del sector.
Además, José Souto, secretario general de la Unión Sindical de Choferes de Autos Rurales y Remises (Uscarra), agregó que “la realidad es que das una vuelta por toda la ciudad y no te encontrás un patrullero, y uno se siente desprotegido mientras que los delincuentes se envalentonan”.
“Muchos remises no cuentan con mamparas sino con un plástico por el coronavirus y la diferencia entre un material y otro es escasa: la mampara cuesta $4000 y el plástico $1500, a compañeros los han ahorcado con los cinturones de seguridad y es por eso que durante el turno noche, muchos los choferes no lo usan”, indicó Souto.
Ante esta situación, el jueves pasado, el gremialista junto a un grupo de remiseros se reunieron con el jefe del Comando de Patrullas, Lucio Pintos y el presidente del Foro de Seguridad, Juan Manuel López, donde las autoridades se comprometieron a la implementación de corredores seguros y móviles.
En tanto, desde Uscarra apuntaron sus cañones hacia Darío Oroquieta, ex secretario de Salud de Mar del Plata, quien renunció a su cargo y que, según el gremio, fue él “quien nos prometió de todo, después de la muerte de un compañero en enero, pero la última semana, hablando por whatsapp me clavó el visto”.
