En el marco del significante aumento de contagios de coronavirus en el país, la ocupación de camas de terapia intensiva del sistema público de salud de los distritos del AMBA aumentó un 17% en cuatro días, según informó el Ministerio de Salud bonaerense.
En ese sentido, en los partidos que conforman el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA), los internados con coronavirus o casos sospechosos que requerían cuidados intensivos al 30 de marzo eran 671 sobre 2.912 camas disponibles, mientras que al 3 de abril llegaban a 788.
Según el último reporte nacional, el nivel de ocupación por toda patología en el AMBA se encuentra en el 62%. En tanto, en los hospitales de la Ciudad de Buenos Aires, se reportó una suba del 26% en una semana.
De esta manera, la cartera sanitaria porteña precisó que al 29 de marzo había en la CABA 142 personas internadas en Terapia Intensiva, con diagnóstico o sospecha de coronavirus, sobre 450 camas disponibles. Ahora, los casos graves ascienden a 179.
En un relevamiento informal que realizó la Sociedad Argentina de Terapia Intensiva (SATI), en algunos centros de salud privados y públicos, la ocupación promedio es del 80% con personas que se encuentran internadas con distintas patologías.
"En estos porcentajes, el número de 'pacientes Covid' todavía es bajo, si las UTI están llenas es porque se están atendiendo otras patologías que quedaron postergadas durante la primera ola de la pandemia", indicó el vicepresidente la entidad, Guillermo Chiappero.
Respecto a las estrategias que evalúan los centros médicos por el advenimiento de la segunda ola, el intensivista indicó que “se prevé postergar las cirugías programadas y recuperar las camas de contingencia de UTI que se habían instalado el año pasado”.
“Si bien la posibilidad de aumentar el número de camas existe, tal como explicamos todo el año pasado, los intensivistas son pocos de por sí, se enfermaron, y todo el personal de UTI está agotado porque no ha tenido descanso entre ola y ola", precisó Chiappero.
Sobre las características de quienes se encuentran internados, el referente de los intensivistas observó que "el año pasado teníamos pacientes arriba de 60 años con comorbilidades y hoy tenemos menores de 50 y sin comorbilidades con mala evolución".
"Esto lo relacionamos con el aumento de casos en esa franja etaria, es decir, tenemos muchos casos en población joven y sabemos que un 5% puede evolucionar mal y un 2% necesitar respirador”, señaló Chiappero.
En torno al comportamiento de la población para con el coronavirus, el médico observó que “la vacuna, sumado a la apertura de actividades, produjo una relajación muy fuerte de los cuidados individuales".
"Las personas se juntan, se sacan el barbijo, no mantienen la distancia, y esto es esencial que se recupere, porque si los casos siguen creciendo a este nivel explosivo no habrá sistema de salud que aguante", indicó el vicepresidente de la SATI.
