El presidente Alberto Fernández recibirá en la Quinta de Olivos a las 13.30 horas a la cúpula de la Confederación General del Trabajo (CGT) con la crisis y el control de las obras sociales como tema central del cónclave.
Se espera que los sindicalistas vuelvan a pedirle al Presidente otro auxilio financiero para las obras sociales, que vienen con gastos en alza, un déficit mensual que crece y problemas de financiamiento que no encuentran resolución.
También se hablará del reemplazante del fallecido Eugenio Zanarini al frente de la Superintendencia de Servicios Sociales (SSS), un organismo clave para el sindicalismo porque administra la millonaria caja de las obras sociales.
La comitiva sindical está integrada por los cotitulares cegetistas Héctor Daer (Sanidad) y Carlos Acuña (estaciones de servicio), Andrés Rodríguez (UPCN), Gerardo Martínez (UOCRA), y José Luis Lingeri (Obras Sanitarias).
También se espera que participen del almuerzo, Armando Cavalieri (Comercio), Antonio Caló (metalúrgicos), Sergio Romero (docentes), Roberto Fernández (UTA) y Jorge Sola (seguros).
De acuerdo a lo que trascendió, la cúpula de la CGT pedirá designar al nuevo superintendente. Hay un nombre como candidato puesto: David Aucharán, un médico cirujano vascular de 50 años, que presidía la obra social y la prepaga de UPCN.
El profesional además de integra el Instituto de Investigación Sanitaria de la Seguridad Social, financiado por gremios que pertenecen a la CGT. Aucharán es actualmente el gerente general de la Superintentencia de Servicios de Salud.
Otro postulante es José Bustos, un abogado especializado en temas de salud que ya estuvo en la Superintendencia durante el gobierno de Néstor Kirchner cuando era encabezada por Héctor Capaccioli, hombre de confianza de Alberto Fernández.
Vale recordar que antes de asumir la Presidencia, Alberto Fernández se había comprometido a que designaría al frente de la Superintendencia a un candidato propuesto por la CGT.
Por eso la central obrera eligió a Aruachán, pero, según la CGT, Cristina Kirchner se opuso a que los fondos de las obras sociales fueran administrados por alguien vinculado con el sindicalismo y así se cayó el acuerdo construido con el Presidente.
Ginés González García designó como titular de la SSS a Zanarini, un experto al que conocía porque secundó en la Universidad Isalud, fundada en 1991 por el ex ministro.
Los dirigentes cegetistas insistirán ante el Presidente en la necesidad de que el Gobierno aplique medidas que alivien la desfinanciación del sistema sindical de salud, cuyo déficit continúa creciendo a un ritmo de $1.500 millones por mes.
El mayor porcentaje de los gastos del sistema de obras sociales (casi un 37%) corresponde al pago del rubro discapacidad (rehabilitación, tratamientos, educación y transporte), que en 2020 representó unos $28.700 millones.
Más allá de la crisis de las obras sociales, la CGT tiene previsto plantearle al Presidente que el Gobierno disponga mayores controles en los precios y reanude la ayuda económica a trabajadores y empresas .
Por caso se espera que pidan un nuevo Ingreso Familiar de Emergencia (IFE) y Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producción (ATP), que se otorgaron durante la cuarentena obligatoria más estricta y finalizaron el 31 de diciembre.
