Un grupo de delincuentes tomó de rehenes a cinco personas en una violenta entradera en la localidad bonaerense de Castelar, y después de amenazarlos, se llevaron al dueño de la casa para asaltar la empresa donde trabajaba, donde sustrajeros USD20 mil.
En el robo quedaron atrapados una familia y dos albañiles, que trabajaban en la vivienda cuando fueron tomados como rehenes por tres delincuentes que cometieron la entradera, tal como informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió el primero de julio frente a una vivienda de la mencionada localidad del partido de Morón, al oeste del Conurbano, y el padre de la familia relató la situación de terror que le tocó vivir.
Es que, después de amenazarlos, el grupo de delincuentes se lo llevaron cautivo a una de las víctimas hasta su empresa, de donde robaron USD 20 mil, según informaron fuentes policiales.
Según se observa en las imágenes, dos albañiles estaban trabajando frente a la vivienda cuando al menos tres delincuentes armados los amenazaron y los hicieron ingresar a la casa.
En el interior de la casa se encontraba la familia dueña del inmueble, compuesta por un matrimonio y su hijo de 25 años, que fueron sorprendidos cuando vieron entrar a los malhechores a punta de arma.
Los asaltantes dejaron a la mujer, al joven y los dos albañiles bajo custodia de uno de ellos y los dos restantes se fueron con el dueño de casa, un ingeniero identificado como Sergio Laufgang (68), hasta las oficinas de su empresa.
Tal como lo relató el propio Laufgang, los delincuentes lo llevaron con intenciones de robarle, aunque la víctima pudo reconocer que los malhechores “estaban nerviosos, salvo el líder” de la banda, a quien describió como “el más equilibrado”.
“El que manejaba estaba muy nervioso. Fuimos hasta mi oficina, que queda a ocho cuadras. Entré y nadie se dio cuenta. Me desvalijaron la oficina”, dijo el hombre que sufrió el asalto.
Aunque la víctima no quiso dar precisiones, los investigadores indicaron que le robaron una cifra cercana a los USD20 mil, pero se desconoce si los delincuentes sabían que existía ese monto antes de perpetrar el asalto.
En ese sentido, Laufgang sostuvo que “el dinero que les di los tranquilizó pero también vieron que se les estaba yendo de las manos porque hubo gente que los vio” entrar a la empresa del ingeniero.
Tras ello, los delincuentes regresaron al hogar familiar, donde finalmente liberaron al resto de los rehenes y huyeron con el botín, situación por la que permanecen prófugos de la Justicia.
“Me amenazaron que me iban a matar a mí y a mi familia, pero no nos golpearon. A mi señora le bajó la presión, está traumatizada, se quiere ir a vivir a otro lado”, aseguró el hombre, quien agregó que en todo momento se mostró “calmo y sin miedo”.
Por otra parte, el ingeniero dijo que cree que se trató de un hecho al voleo y descartó que los albañiles tengan algo que ver con lo sucedido, ya que los conoce “hace más de 40 años”.
Finalmente, el dueño de la casa declaró que en los últimos 15 días hubo 19 robos en el mismo barrio donde reside. “Tengo cámaras y rejas pero no alcanza”, concluyó sobre la constante inseguridad de la zona.
