viernes, abril 19, 2024

Entre internas y silencios, así vivieron los diputados provinciales el debate por el aborto legal

Apenas una decena se pronunciaron sobre el tema. En algunos casos las diferencias afloraron en público.

El debate por la sanción aborto legal que esta mañana dio su primer paso en Diputados, además de poner en relieve una deuda histórica que tenía el parlamento con la sociedad argentina, expuso con crudeza las profundas contradicciones que se desarrollan al interior de las diferentes fuerzas políticas.

Estas diferencias afloraron ayer de manera desmesurada en la Cámara baja nacional durante la discusión que llevó casi 23 horas. Hubo enfrentamientos entre diputados de un mismo bloque, otros se cambiaron de espacio para poder votar a favor y muchos que apelando a la misma doctrina defendían posiciones distintas.

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Este escenario de tensión, aunque con algunos matices, se replicó entre los legisladores bonaerenses. Desde los bloques chicos hasta los más numerosos encontraron diferencias. Una prueba de ello fue el resguardado silencio que mantuvo la mayoría. A penas una decena fueron los que fijaron posición sobre el tema.

Ni los diferentes espacios peronistas, ni Cambiemos lograron encontrar la unidad. En el caso del kirchnerismo fue el diputado de San Antonio de Areco, Mariano Pinedo, quien abrió la grieta con su empuje al espacio “peronistas por la vida”. Del otro lado de la vereda se ubicaron la gran mayoría de sus compañeros de bancada en sintonía con la postura nacional que adoptó su fuerza política.

En el Frente Renovador también se expresaron disidencias. El único diputado que se mostró activo en las redes sociales y pidió por la sanción fue Lisandro Bonelli –acaso siguiendo la línea de uno de sus mentores políticos el ex ministro de Salud, Ginés González García. Pero el presidente de bloque, Rubén Eslaiman, llegó a aclarar públicamente en encuentro en Diputados su descontento con el avance del aborto legal.

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En este dirección el oficialismo no fue la excepción, sino quizás todo lo contrario, con la cuota de sensibilidad extra que aporta conducir el Ejecutivo provincial. Las internas que emergieron tras el cruce del ministro de Gobierno, Joaquín De la Torre, con el titular de la cartera de Salud Nacional, Adolfo Rubeisten, se pusieron de manifiesto otra vez durante la jornada de hoy.

El ex ministro de San Miguel, que pertenece al núcleo duro de Vidal, volvió a rechazar públicamente la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo. Mientras tanto fueron pocos los legisladores que se animaron a expresarse.

El más contundente fue el quilmeño Fernando Pérez, quien tajante aseguró que “la criminalización del aborto no sirve, solo lo convierte en algo clandestino e inseguro para la mujer”. Los otros tres que se refieron al tema fueron Daniel Ivoskus, y los dos de diputados que responden a Jorge Macri, César “Tuta” Torres y Verónica Barbieri. Anque ellos prefirieron destacar el debate y la convivencia de ideas, sin tomar partido. 

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