El proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo (IVE) fue uno de los debates más calientes del 2018. Si bien en junio obtuvo media sanción en una histórica sesión en Diputados, en agosto fue rechazado por el Senado y quedó trunco.
Pero la batalla por el aborto, que enfrentó fuertemente a verdes y celestes, volverá en marzo de 2019. El proyecto será presentado por octava vez ante el Congreso, según informaron voceras de la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito.
El trabajo de estas horas pasa por llegar a una nueva redacción, que mantiene el núcleo de la iniciativa (el aborto legal, en instituciones de salud de todo el país) pero con cambios que surgieron durante el debate, con el objetivo de ampliar los apoyos.
En los primeros días de marzo el texto sería aprobado en un plenario de la Campaña, para ser presentado hacia mediados de mes. La idea es realizar “un acto simbólico” para seguir sosteniendo la sanción de la ley.
Una de las principales dificultades a la que se enfrenta el nuevo texto es la composición del Senado –que se mantiene igual durante 2019- donde el antiabortismo ganó la pulseada con 38 votos negativos, contra 31 afirmativos.
“El nuevo proyecto estará en función de lo aprendido en 2018, para no incorporar cosas que terminen en falsos debates”, señaló Jenny Durán, de “Católicas por el derecho a decidir”.
En discusión hay puntos como el aborto en casos de malformaciones fetales, las penalidades a los médicos o la objeción de conciencia, que generaron mucha discusión cuando el asunto se trató en el Congreso.
El diputado Daniel Lipovetzky (Pro) quien como presidente de la Comisión de Legislación General condujo el debate de meses en Diputados, indicó que un objetivo será presentar el proyecto con más firmas que las 70 de la última vez.
Para la diputada Brenda Austin (UCR – Córdoba), otra de las impulsoras de la ley, “hay que construir estrategias que nos permitan ampliar la base de sustentación y llegar a la sanción”.
