Mar del Plata fue uno de los puntos de la provincia en donde se reflejaron las protestas y cacerolazos en contra de la reforma jubilatoria aprobada por el oficialismo en el Congreso de la Nación. A esto hay que agregarle la resistencia de sectores de la oposición a la aprobación del Presupuesto municipal.
Por este motivo, el intendente de la localidad balnearia, Carlos Arroyo, lanzó un operativo para desactivar la protesta social y esperar el punto más álgido de la temporada turística en relativa tranquilidad. A través de la Secretaría de Desarrollo Social el jefe comunal repartió 167 mil kilos de alimentos a más de 200 instituciones.
“La verdad es que fue un operativo muy ordenado pudiendo llegar a todas estas agrupaciones estos alimentos para que se pueda celebrar en estas fiestas”, destacó la secretaria del área, Patricia Leniz.
“Estuvo todo el equipo de Desarrollo Social trabajando en los depósitos y también con la ayuda de camiones del Gada y otras áreas municipales”, agregó la funcionaria municipal.
El reparto de alimentos se concentro en comedores sociales, merenderos, ONG, Organizaciones Sociales y Cooperativas.
