* Por Silvio Bageneta
En general, el deber corresponde a los que gobiernan y los derechos a los gobernados. Aunque hay oportunidades en que se revierte. Por ejemplo en Argentina el ciudadano debe votar en cada elección. Debe cumplir con las ordenanzas municipales, o las leyes provinciales o nacionales, instancias en que se determinan las tasas Municipales, los impuestos provinciales y Nacionales.
Todos tenemos la referencia ineludible de la Constitución Nacional Argentina, para signar los derechos y obligaciones de los argentinos.
El Preámbulo de la Constitución Argentina de 1994 dicta: “Nos los representantes del pueblo de la Nación Argentina, reunidos en Congreso General Constituyente por voluntad y elección de las provincias que la componen, en cumplimiento de pactos preexistentes, con el objeto de constituir la unión nacional, afianzar la justicia, consolidar la paz interior, proveer a la defensa común, promover el bienestar general, y asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino: invocando la protección de Dios, fuente de toda razón y justicia: ordenamos, decretamos y establecemos esta Constitución para la Nación Argentina.”
¿Cómo se constituye la unión Nacional? Con políticas que integren a las grandes mayorías del pueblo y la Nación Argentina. Donde primero está la Patria. Respetando las instancias Legislativas Nacionales y alejándose de los DNU (Decretos de Necesidad y Urgencia) para imponer políticas económicas que terminan favoreciendo a los grupos económicos nacionales asociadas al interés económico y político extranjero.
¿Cómo Afianzar la Justicia? Permitiendo el libre ejercicio del Poder Judicial, sin inmiscuirse el Poder Ejecutivo (Mauricio Macri, Marcos Peña, Germán Garavano o Patricia Bulrich) en las decisiones de La Corte Suprema de Justicia y/o de los Juzgados que deben responder en consonancia. La persecución a la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner por el Juzgado de Comodoro Py a Cargo del Juez de las servilletas Bonadío, no tiene límites. Desde la ridícula excavación en la Patagonia buscando Contenedores gigantes con dinero, hasta la acusación de los cuadernos (que no aparecen después de comprobarse inexactitudes groseras, como que la marca de los cuadernos no correspondían con la existencia de los mismos) que hoy son fotocopias. ¿Qué juez, qué abogado puede dar como válida una FOTOCOPIA para una acusación? Jueces perseguidos por destapar causas contra Macri y sus funcionarios, hasta que renuncian a causas o directamente se jubilan. Evidentemente no se afianza la Justicia.
¿Cómo promover el bienestar general? No puede promoverse el bienestar general con más de 2.000.000 de desocupados en los últimos 3 años. Con jubilados que ven perdidos sus medicamentos de PAMI, sus ingresos reducidos (ya que ajustaron sus derechos). En los últimos tres años cerraron 9500 pequeñas y Medianas empresas en Argentina. El dato es de Asociación PyME. Sin contar los miles y miles de empleados, trabajadores y obreros que eran empleados Estatales en muchos casos con más de 20 o 30 años de antigüedad. En tanto la información respecto de Salud, Educación y Nivel adquisitivo de la población, en todos los casos son decrecientes.
¿Cómo asegurar los beneficios de la libertad? Este precepto del preámbulo de la Constitución Nacional, base de la democracia y la república está muy débil. Con muertes y represión a colectividades mapuches, con detención en el noroeste argentino, de grupos de dirigentes populares; con represión a trabajadores de diferentes gremios, con represión furiosa de las policías contra las diversas movilizaciones feministas, con gas pimienta, golpes con bastones, a mansalva a mujeres, hombres, jóvenes, ancianos. Detenciones arbitrarias y causas de igual talante. Los derechos de los ciudadanos de manifestarse establecidos en la Constitución Nacional no se ven reflejados.
¿Cómo asegurar los beneficios de la libertad, para nosotros, para nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en el suelo argentino? Con un pensamiento Sudamericano por un lado y Liberal por otro que han existido en nuestra historia, unos y otros con diferentes contenidos. Es en la actualidad un momento en que la discriminación a nuestros compatriotas con piel trigueña, levemente oscurecida tiene día a día desde el mismo gobierno, un carácter muy acentuado. Basta solo mencionar al Ministro de Producción Dante Sica y su campaña sustentada con un afiche. l
Pero esta campaña no sólo está destinada a los argentinos, sino que nuestros hermanos Chilenos, paraguayos, bolivianos, peruanos, ecuatorianos, etc. pueden habitar nuestro territorio Argentino y no los Europeos que Sarmiento y Mitre (entre otros) trajeron a nuestro suelo para “mejorar la especie”.
Los Artículos 15 y 16 vigentes en nuestra Constitución Nacional Argentina, nos dicen lo siguiente:
Art. 15.- En la Nación Argentina no hay esclavos: los pocos que hoy existen quedan libres desde la jura de esta Constitución; y una ley especial reglará las indemnizaciones a que dé lugar esta declaración. Todo contrato de compra y venta de personas es un crimen de que serán responsables los que lo celebrasen, y el escribano o funcionario que lo autorice. Y los esclavos que de cualquier modo se introduzcan quedan libres por el solo hecho de pisar el territorio de la República.
Art. 16.- La Nación Argentina no admite prerrogativas de sangre, ni de nacimiento: no hay en ella fueros personales ni títulos de nobleza. Todos sus habitantes son iguales ante la ley, y admisibles en los empleos sin otra condición que la idoneidad. La igualdad es la base del impuesto y de las cargas públicas.
Queda en manos y en la decisión de los que estén viendo esta nota leer la Constitución Nacional, detenidamente y pausadamente, para conocer los derechos y deberes que tenemos, que tienen los que habitan el territorio de la República Argentina.
*El autor actualmente participa la AM 1440 del Partido de la Costa, fue militante de la Juventud Peronista y ex coordinador del INAES durante el gobierno de Cristina Kirchner.
