La historia de Santiago, un joven de 26 años que recibió un trasplante de riñón en Mar del Plata, es una más de las tantas que se acumulan en el listado de pacientes abandonados por el Instituo de Obra Médico Asistencial (IOMA).
El joven atraviesa varias patologías por lo que los profesionales le recetaron una gran cantidad de medicamentos y aceite de cannabis para paliar sus dolencias pero la obra social bonaerense pone trabas para la entrega.
“Tuvo dos ACV, cáncer de esófago, atrofia muscular espinal. El 22 de septiembre interpusimos un amparo porque IOMA no le cumple con los medicamentos. Además él necesita un bipap y muchos remedios”, señaló el abogado de la familia, Julián Mascitti.
Lo peor no pasó para Santiago tras el trasplante de riñón que recibió en la localidad balnearia ya que además está por quedarse en la calle junto a su familia porque no pueden costear los gastos del departamento donde viven.
“Al no poder estar internado en la Clínica por problemas inmunológicos, los médicos de la Colón le encontraron un departamento cercano pero ya no lo pueden pagar. Esperemos el juez haga lugar al pedido para que IOMA cubra el alquiler, porque su habitación es una unidad de terapia”, explicó el abogado.
Según señaló Mascitti, Santiago es víctima de una enfermedad terminal y los medicamentos y el aceite de cannabis que recetaron los médicos son para ayudarlo a que mantenga una mejor calidad de vida, hecho que la mutual ignora.
“Denunciamos incumplimiento y notificación personal al presidente de IOMA, van a operar a Santi para sacarle pólipos cancerígenos y aún no obtuvimos respuesta”, remarcó el letrado.
Todas las semanas se suman denuncias de vecinos de la Provincia con dolencias y enfermedades muy graves que requieren de la correcta implementación del servicio del IOMA pero además de luchar por su salud, entran en batallas burocráticas que los van golpeando cada vez más fuerte.
