La Red de Sobrevivientes de Abuso Eclesiástico de Argentina acusó al arzobispo de La Plata, Víctor Manuel “Tucho” Fernández, de encubrir a un cura denunciado de abuso sexual en Gonnet.
En rigor, se trata del párroco Eduardo Lorenzo que obtuvo la licencia del mismo Fernández luego de ser denunciado y ahora se encuentra realizando tareas para Cáritas en la capital bonaerense.
“Me gustaría saber si el arzobispo se va a dignar a hablar con las víctimas porque ya es tan evidente lo que contamos que no se puede tapar, pero eso no va a suceder”, afirmó una de las víctimas, Julián Bartoli.
En este sentido, el joven que afirma haber sido sometido por Lorenzo apuntó contra Fernández en la conferencia de prensa que dieron los miembros de la red para presentar un cuarto caso ocurrido entre los años 2001 y 2002.
“La Iglesia tenía una oportunidad para definirse de qué lado estaba y eligió estar del lado de Lorenzo. Se autoidentifica como pedófila, abusadora, misógina y coartadora de libertades sociales”, sentenció Bartoli.
Sin embargo, los familiares de víctimas no sólo cruzaron al actual dirigente de la diósesis, sino que también señalaron la complicidad y el encubrimiento de toda la curia platense durante los 30 años en los que Lorenzo estuvo en el sacerdocio.
El cura, fue confesor del Padre Grassi, y está denunciado por abuso sexual con acceso carnal agravado estuvo bajo las órdenes de los arzobispos Antonio José Plaza, Antonio Quarracino, Carlos Galán y Héctor Aguer.
Asimismo, Bartoli pidió que la causa se eleve a juicio y se logre “una condena ejemplar”. “Será una lección para otros curas pedófilos que tienen ganas de abusar de niños, que tienen ganas de arruinarles la vida”, indicó.
Cabe destacar que la fiscal Ana Medina tiene en sus manos la causa contra Lorenzo desde 2008. A pesar de contar con los testimonios de cuatro víctimas todavía no definió el procesamiento, la prisión preventiva y la elevación a juicio.
“Hay un pedófilo suelto y cada hora que pasa, es una hora que esta persona puede abusar de un chico, puede maltratar a una mujer, puede maltratar a cualquier persona”, enfatizó la víctima de abuso.
En tanto, este jueves y el viernes 15 de noviembre, Lorenzo deberá someterse a las pericias psiquiátricas en la dirección de Asesoría Pericial de La Plata, en calle 41 entre diagonal 114 y diagonal 115.
La cuarta víctima
La nueva víctima es Juan, quien sufrió los abusos del cura Eduardo Lorenzo durante los años 2001 y 2002 cuando estaba a cargo de la iglesia Nuestra Señora de Lourdes –el mismo lugar donde Julián conoció a Lorenzo.
El cura los invitaba a cenar a su departamento, a la casa parroquial y hasta a una quinta que alquilaba todos los veranos en Villa Elisa. En esas reuniones nocturnas circulaba alcohol, dormía con ellos y los abusaba siendo niños de entre 13 y 15 años.
Según se detalla de la declaración, Juan expresó que “en 2001 llego a La Plata y lo primero que hice fue buscar una iglesia porque mi familia era muy católica, éramos de esas familias que íbamos a misa todos los días. Ahí voy a la parroquia de Lourdes y lo conocí a Lorenzo".
“Recuerdo episodios de estar en la cama de su habitación. Estar acostados y abrazados, y él me decía que le gustaba mi olor y me pedía que le acariciara la cabeza. Se encargaba de demostrarme que no había nada malo en compartir la cama o estar abrazados porque éramos amigos”.
“Un día en la quinta, cenamos en el patio, estábamos solos y después nos quedamos charlando de sobremesa. La quinta era un desfile de amigos de Lorenzo, ahí empecé a sentir que yo me había mudado a la quinta y tenía que atender a todos sus amigos”.
